Cuando llega el invierno, las escapadas a destinos rurales cobran un encanto especial, más aún si coincide con las fechas navideñas. Las bajas temperaturas invitan a buscar lugares donde disfrutar del calor de una chimenea, rodeados de paisajes naturales. Y, en estas, la Sierra de Huelva se erige como uno de los destinos favoritos para quienes desean hacer una escapada invernal. No son pocas las localidades donde desplazarse dentro de esta zona de la provincia onubense. Desde Higuera de la Sierra , famosa por su cabalgata de Reyes del 5 de enero , hasta Beas , donde se encuentra el Belén Viviente más antiguo de Andalucía , pasando por La Umbría , una aldea de cuento con apenas 200 habitantes donde entrar en contacto con la naturaleza en todo su esplendor, la oferta es irresistible. Pero hay un lugar, declarado Bien de Interés Cultural, que también destaca en la Sierra de Huelva y que, a menos de dos horas de Sevilla, promete convertirse en el destino perfecto para este invierno. Ese pueblo de Huelva al que nos referimos, ideal para visitar en invierno, es Linares de la Sierra , una localidad enclavada entre Alájar y Aracena, en pleno Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche . Este pequeño municipio, con apenas 350 habitantes, conserva de forma excepcional la arquitectura tradicional de la zona , lo que le ha servido para ser declarado Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía . Situado a un poco menos de una hora y media en coche desde Sevilla , su proximidad convierte a Linares de la Sierra en una opción ideal para quienes buscan escapar del ajetreo de la ciudad y desconectar en la sierra. Una vez allí, pasear por sus calles estrechas y empedradas es como viajar en el tiempo , descubriendo rincones como la iglesia parroquial de San Juan Bautista, a la que se adosa una singular plaza de toros, la Fuente Vieja y el antiguo lavadero. Y, cómo no, el pueblo está rodeado de un paisaje natural impresionante , el cual invita a recorrer sus senderos, descender hasta el río y cruzarlo por sus encantadores puentes de piedra. Asimismo, Linares de la Sierra también seduce por su rica gastronomía , con platos típicos de la zona como el ajo batanero, los tapiales, los vilortos con huevo, el gazpacho de invierno o la sopa de tomate, que reflejan la esencia de la cocina serrana. Además, la localidad cuenta con diversos alojamientos rurales que lo convierten en un refugio perfecto para disfrutar de la tranquilidad invernal.
