La NBA celebró este miércoles 25 de diciembre su tradicional 'Christmas Day', una jornada de partidos enfocado aún más si cabe en el aficionado y que dejó actuaciones estelares, finales de infarto e incluso un apasionante duelo de gigantes entre Stephen Curry y sus Golden State Warriors y Los Ángeles Lakers de LeBron James . Todo un clásico moderno de la liga de baloncesto estadounidense. La victoria cayó del lado angelino (113-115) pese a jugar lejos de casa, pero el duelo particular entre dos de las figuras más relevantes de la NBA en los últimos años fue para el incombustible Curry. El líder de los Warriors sumó 38 puntos, convirtiéndose en el mayor anotador del partido, y la mayoría de ellos llegaron desde más allá de la línea de triples. El de Ohio consiguió nada menos que ocho, empatando el récord de la NBA para un partido navideño. Sin embargo, una bandeja ganadora a falta de un segundo para el final de Austin Reaves permitió a Los Ángeles Lakers sobreponerse a la lesión de Anthony Davis y superar a los Golden State Warriors en San Francisco. A pesar de perder definitivamente a Davis por una torcedura de tobillo izquierdo en el octavo minuto del partido, los Lakers mantuvieron la ventaja durante casi los últimos tres cuartos, lo que llevó a una cuarta victoria en cinco partidos. La ventaja era de 109-100 cuando James asistió a Max Christie en una canasta a falta de 1:30 para el final antes de que Stephen Curry se robara el espectáculo casi sin ayuda de nadie. Después de que Jonathan Kuminga clavara el balón y Dennis Schroder metiera un triple para acercar a los Warriors, Curry anotó una bandeja antes de meter un par de triples improbables en los últimos 12,2 segundos, incluido un tiro lejano que empató el partido con 7,6 segundos restantes. Los Lakers intentaron entonces pasarle el balón a James, pero optaron por Reaves cuando los Warriors marcaron a la estrella de Los Ángeles. Reaves no dudó, llevó el balón directamente al aro para una bandeja disputada que produjo los puntos ganadores del partido. Reaves sustituyó a Davis, anotando cuatro triples en camino a 26 puntos que complementaron 10 rebotes y 10 asistencias, el máximo del equipo. El triple-doble fue el tercero de su carrera, el primero de esta temporada. El máximo anotador de todos los tiempos en los partidos de Navidad de la NBA, LeBron James , acertó 12 de sus 22 tiros y también encontró tiempo para fabricar 10 asistencias y sumar dos robos, lo que supuso el máximo del partido. Rui Hachimura colaboró con 18 puntos, Christie con 16 y Dalton Knecht con 13 para los Lakers, que aparecían en el menú navideño de la NBA por 26ª temporada consecutiva. Por parte de los locales Curry ganó su duelo anotador con James gracias a sus 38 puntos , la mejor marca personal del encuentro. Andrew Wiggins respaldó a su líder con 21 puntos para los Warriors, que perdieron por quinta vez en sus últimos seis partidos. Kuminga terminó con 14 puntos, mientras que Schroder y Trayce Jackson-Davis agregaron 11 cada uno para Golden State. Draymond Green tuvo 10 rebotes, seis asistencias, cuatro bloqueos y tres puntos. En el resto de los partidos destacados de la jornada navideña la brillante actuación de dos magos del baloncesto como el veterano Kyrie Irving (Dallas Mavericks) y el emergente Victor Wembanyama (San Antonio Spurs) se quedó sin el premio de la victoria en sendas derrotas contra New York Knicks (117-114) y Minnesota Timberwolves (99-105). Uno con siete partidos anotando más de 20 puntos un 25 de diciembre, actuaciones memorables todas ellas como la que dejó esta vez en el American Airlines Center (Dallas) con 39 puntos. Otro en su primera aparición en la tradicional cita navideña, a sus 20 años, pero firmando 42 puntos y 18 rebotes, también con derrota. Irving sacó su magia ante unos Wolves que manejaron una renta de 28 puntos, 22 en el inicio del último cuarto, pero terminaron pidiendo la hora. La remontada de los Mavericks fue sin Luka Doncic, lesionada la estrella local al final del segundo cuarto, sin culminar en el último minuto con 99-101. Anthony Edwards y Julius Randle evitaron otro revés en la mala dinámica de los de Minnesota, confiados ahora en cambiar esa inercia con la revancha de la final de Conferencia Oeste del año pasado. Con todo, la debacle rondó a los Wolves con un Irving que en el último cuarto anotó más que todo el equipo rival, sin culminar con un triple definitivo con la respuesta seguida de Edwards. Mientras, en el duelo que abrió la jornada del 25 de diciembre, los focos estaban sobre la 'sensación Wembanyama '. El francés, en su primer partido en Navidad, respondió a la expectación con una actuación legendaria , su gran puesta de largo en el Madison Square Garden de Nueva York con 42 puntos y 18 rebotes, su récord de anotación. Sin embargo, Karl-Anthony Towns despertó en el tercer cuarto y Mikal Bridges entró en ebullición para terminar en 41 puntos, decisivo en las últimas jugadas como el rebote ofensivo de los Knicks, que sumaron su quinta victoria seguida.