Santo Domingo.- Mientras muchos dominicanos viajaban al interior del país para celebrar la Navidad, algunos decidieron quedarse en la capital para evitar los riesgos de accidentes de tránsito en las carreteras.
Esta decisión, impulsada por la preocupación por la seguridad vial, afectó los planes de algunos, mientras que otros encontraron ventajas en la tranquilidad de una ciudad más despejada.
Alexis Delgado, residente de Sabana Perdida con familiares en el interior, explicó: «Imagínate, uno mejor se queda aquí para evitar accidentes; aquí, tranquilo, la estamos pasando bien«.
En contraste, Rogers Encarnación lamentó no poder visitar a sus parientes en Santiago por falta de recursos económicos para el viaje. «Es que ya es una inversión uno moverse para el campo; yo resido aquí y mi familia allá, pero la cosa está difícil«, señaló.
Johnatan Cruz, vendedor de «Fríos Fríos» en el Malecón, también se quedó en la capital por motivos laborales. «Yo me quedé porque tengo que trabajar, pero la cosa está lenta; espero que mientras vayan llegando, me compren«, expresó.
Yefre Carrasco compartió una situación similar, justificando su permanencia en Santo Domingo por compromisos laborales.
Flavia Frías y su hija Elizabeth Gerónimo, quienes no tienen familiares fuera de la capital, destacaron el beneficio de disfrutar de una ciudad más tranquila y despejada durante las festividades.
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