En medio de la creciente incertidumbre en el comercio de Estados Unidos por la llegada del presidente electo Donald Trump, el subgobernador del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, consideró que el Banco de México podría discutir un recorte de tasas del 25 o 50 puntos base en su próxima decisión en febrero del 2025.
El subgobernador de Banxico recalcó que la decisión final depende de las condiciones que haya al momento de la reunión.
La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió el pasado 20 de diciembre, recortar la tasa de interés en 25 puntos base, con lo que se ubicó en 10 por ciento. A la par, elevó sus expectativas de inflación ante la incertidumbre por posibles aranceles de Estados Unidos.
Aunque desde la semana pasada Banxico advirtió que podrían realizar recortes mayores a medida que la inflación continúa desacelerándose.
No obstante, la amenaza del republicano de aplicar aranceles del 25 por ciento a todos los productos procedentes de México ha añadido incertidumbre sobre el Banco Central.
“Si Trump no anuncia una disrupción importante (en su discurso inaugural) el 20 de enero, si la inflación está en línea con las proyecciones y siempre que no haya un shock imprevisto, la discusión antes de la decisión de febrero podría ser entre recortar la tasa de referencia en 25 a 50 puntos básicos”, dijo Heath a Reuters en entrevista.
Asimismo, el economista señaló que dicha decisión dependerá de otros factores como las perspectivas económicas, las perspectivas de las agencias de calificación y más información sobre la inflación de los servicios, que ha sido inestable.
“Incluso si se produce el debate, no se dará por sentado un ajuste mayor. Pero cualquier recorte mayor a 50 puntos básicos de la tasa actual del 10 por ciento estaría “completamente fuera de cuestión”, comentó Heath.
Sin embargo, la decisión de la junta puede no ser unánime, dijo Heath, ya que otros miembros de la junta no están de acuerdo sobre la rapidez y el tamaño del recorte de las tasas para llevar la inflación nuevamente al objetivo.
“Con la información actual, la tasa de referencia a fin de 2025 entre el 8 por ciento y el 8.5 por ciento es “razonable”, recalcó Heath.
Los analistas esperan que la economía crezca solo un 1.12 por ciento el próximo año, frente al 1.6 por ciento de este año. Creen que la inflación general cerrará 2025 en un 3.8 por ciento, una desaceleración respecto del 4.37 por ciento de finales de 2024.
Heath atribuyó la desaceleración esperada a la cautela del sector privado ante un entorno incierto y de alto riesgo, así como a una política fiscal estricta con poco margen de maniobra mientras el gobierno trabaja para controlar el déficit.
“Sin embargo, mientras persista la lentitud, es más probable que alcancemos nuestra meta de inflación en el plazo estimado”, afirmó. “Eso nos llevará a seguir bajando la tasa hasta alcanzar una postura neutral”.