Obtener una Green Card en Estados Unidos a través de un empleo implica cumplir con requisitos tanto del inmigrante que la solicita como del patrocinador, que en este caso es el empleador. Este último debe demostrar su capacidad para respaldar la petición ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU. (USCIS).
El proceso de patrocinio es crucial, ya que el empleador debe cumplir con diversas condiciones que aseguran la legalidad y viabilidad de la oferta laboral. Entre estos requisitos se encuentran la capacidad económica, el cumplimiento de regulaciones laborales y la verificación de la disponibilidad de trabajadores estadounidenses para el puesto ofrecido.
A continuación, se detallan los principales requisitos que debe cumplir el empleador para obtener la Green Card por empleo en EE. UU.:
Este es uno de los pasos fundamentales en el proceso. El empleador debe obtener una certificación del Departamento de Trabajo de EE. UU. (DOL), conocida como PERM. Esta certificación demuestra que no hay trabajadores estadounidenses calificados para el puesto ofrecido. Además, el salario propuesto debe cumplir con el estándar prevaleciente en la región, y se deben realizar esfuerzos activos para contratar a trabajadores locales antes de considerar a un extranjero. Es importante tener en cuenta que esta certificación tiene una validez de 6 meses desde su aprobación.
Una vez obtenida la PERM, el empleador debe presentar el Formulario I-140 ante USCIS para clasificar al trabajador en una categoría de inmigración basada en empleo, como EB-2 o EB-3. Este paso incluye demostrar que el empleador tiene la capacidad financiera para pagar el salario ofrecido y que la oferta de empleo es legítima y permanente. Este formulario se puede encontrar en el sitio web oficial de USCIS.
En algunos casos, especialmente cuando el trabajador inmigrante tiene familiares que también buscan la residencia, el empleador puede necesitar presentar este formulario. La Declaración Jurada asegura que el patrocinador tiene los recursos económicos suficientes para apoyar al inmigrante y evitar que se convierta en una carga pública.
El empleador debe cumplir estrictamente con las normativas laborales e inmigratorias de Estados Unidos. Esto incluye no tener antecedentes de violaciones, llevar registros precisos de salarios y condiciones de empleo, y garantizar que las condiciones laborales no perjudiquen a los trabajadores estadounidenses.
Las Green Cards por empleo se dividen en categorías como EB-2 (para trabajadores con títulos avanzados o habilidades excepcionales) y EB-3 (para trabajadores calificados y profesionales). Cada categoría tiene requisitos específicos que tanto el empleador como el empleado deben cumplir para que la solicitud sea aprobada.
Es esencial que el empleador proporcione toda la documentación requerida para respaldar la petición, incluyendo pruebas de la capacidad financiera y detalles del puesto de trabajo.