El político centrista Mesías Guevara, exgobernador de Cajamarca y excongresista, reflexiona sobre el actual Parlamento, sus recientes cuestionamientos, y comparte sus expectativas para el 2026 en su propósito de construir una alternativa de centro, pese a la debilidad que esta ha mostrado en la anterior competencia electoral.
—¿Qué reflexión le genera la denuncia de una red de prostitución en el Congreso?
—Es una denuncia grave, penosa y lamentable que pone al Congreso en el sótano de la democracia, algo que jamás era probable de pensar. Además, hace que pierda legitimidad y mancille su investidura. La Fiscalía tiene que investigar a profundidad para dar con los responsables y sancionarlos.
—¿Cómo entender que den una ley que limite la detención y luego aleguen descuido?
—El Congreso está legislando para sus intereses y no para la Nación. Para hacer una ley, más aún de este tipo, debe evaluarse el impacto a nivel de 360 grados. La han hecho solo pensando en ellos sin tener en cuenta los efectos colaterales y después han tenido que retroceder.
—Su principal interés era...
—Buscaban desde favorecer redes criminales, impunidad para ellos mismos y sus líderes, porque muchos están seriamente implicados en casos que ya se investigan en Fiscalía.
—¿Cómo alegan descuido si tienen asesores y recursos?
Tienen asesores en su despacho, también del servicio parlamentario en secretarías técnicas de comisiones. En Oficialía Mayor tienen apoyo. Además, pueden buscar enterarse de lo que el pueblo necesita más.
—¿Por qué cada Congreso se percibe peor que el anterior?
—Las democracias se están debilitando y se está privilegiando el dinero sobre el debate, las propuestas. Se las reemplaza por este tipo de prebendas. Eso hace que aventureros de la política lleguen con mayor frecuencia. Por eso, vemos a congresistas sin la calidad ni capacidad.
—¿Hasta dónde cree que la ciudadanía lo vaya a tolerar?
—La ciudadanía está protestando. Salvo espacios como La República, pocos muestran lo que pasa en el país. Hay muchas manifestaciones contra el Congreso y Boluarte. El pueblo también se está expresando en encuestas. Pero también hay miedo por la represión brutal.
—Dice que Boluarte está en el poder por la derecha y las economías ilegales y no por el voto por Castillo. ¿Por qué?
—En el fujimorismo, buscaron pasar a segunda vuelta con el más débil y procuraron demoler a los de centroizquierda y centroderecha. Al final, se dieron con la sorpresa. En segunda vuelta, surgió el partido más grande, el antifujimorismo, y dio el triunfo a Castillo con Boluarte. Gestaron esto quienes apoyaron a Fujimori en primera vuelta y las economías criminales y mercantilistas que la apoyaron ya en el Congreso...
—Por eso en el Congreso la salvaron de investigaciones...
—Iba a ser acusada constitucionalmente e inhabilitada, pero la salvaron los conservadores anticaviares, anticomunistas, providas. Y la sostienen.
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—Usted fue de Acción Popular y pasó al Partido Morado. ¿Cómo va el centro político?
—Es grande. En encuestas, el porcentaje más grande está entre la centroizquierda y la centroderecha. Es más grande que la izquierda y derecha radicales. El pueblo quiere un gobierno que dé empleo, confianza, esperanza. Por eso, no apuesta por radicales. El gran desafío del centro es encontrar sintonía de propuesta con todos los partidos de centro y con el pueblo. Y debe haber desprendimiento de quienes quieren liderar ese centro y evaluar sus posibilidades.
—¿Qué hace con ese fin?
—En el Partido Morado estamos trabajando fuerte recorriendo el Perú. Estoy viajando dando el mensaje de seguir fortaleciendo y consolidando liderazgos regionales: serán el soporte de una campaña nacional. Y siempre dando propuestas.
—Ya que Francisco Sagasti ratificó que no postulará a la presidencia, ¿será usted ese candidato del Partido Morado?
—Depende de la democracia interna, lo que digan las bases. Como militante disciplinado y demócrata, tengo que acatar lo que decida la militancia. Estoy dispuesto a asumir lo que el partido y la militancia prevean.
—¿Deben ir en un frente de centro o cada partido solo?
—Es lo ideal hacer un frente desde la centroizquierda hasta la centroderecha teniendo como eje al Partido Morado, que es el centro centro. La campaña del 2026 será muy agresiva, violenta. A más de un año, se ha adelantado. También la violencia: se ve en redes, entrevistas, en diversas manifestaciones.
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—¿Qué rol tendría Sagasti?
—Espero que él lidere ese frente. En primer lugar, que ayude a construirlo. En su momento, debe decir si lo lidera políticamente de cara a la elección del 2026 o no. Ahora, como personalidad por sus credenciales, debería ayudar a construirlo.
—¿Es decir, insiste en que sea candidato presidencial?
—El protagonismo de personajes como Sagasti debemos de mantener siempre latente, y por supuesto que la decisión pasa por él, pero así no sea candidato, debe ser gran protagonista de construir ese gran frente de centro. Debe convocarnos a todos los partidos políticos, y allí ya se decidirá quién lidera ese frente. Si no es Francisco, alguien que esté comprometido con el país.
—Usted ha publicado un libro sobre digitalización...
—Es Por la gran revolución digital. El Qhapaq Ñan de nuestros tiempos. Para que el Perú salga adelante debemos hacer gobierno digital: así será transparente, eficaz, mejorará servicios. El libro trae lineamientos fundamentales para ese desarrollo.
—¿Cómo el centro puede ser atractivo para el electorado?
—Una encuesta ratifica que hay desesperanza, desconfianza, indiferencia. El pueblo no apostará necesariamente por radicales, sino por quienes le ofrezcan camino de esperanza, para sacar adelante a su familia y sus proyectos. Los de centro debemos trabajar para confrontar con los radicales, que ni saben qué hacer con el Perú, pero creen ganar con bravuconadas.
