El Córdoba está recopilando noticias positivas en el cierre del 2024. La victoria sufrida en Oviedo certificó el buen estado de forma de algunos jugadores de la plantilla que se suman a la causa para la segunda vuelta. Es el caso, entre otros, de Théo Zidane. El centrocampista francés ha ido de menos a más durante el curso en Segunda División y ahora parece haber encontrado su sitio, siendo titular para Iván Ania y aportando ofensivamente al equipo. Con goles y sobre todo con esa visión en el último pase para que las múltiples llegadas blanquiverdes lleguen a puerto. Desde la segunda línea, se ha destapado como goleador porque lleva ya cuatro goles con el equipo. Números que le convierten en el segundo máximo goleador del equipo , por detrás de Antonio Casas que lleva ocho. El equipo pedía que la segunda línea aportarse más goles, dado que el rendimiento goleador del equipo no podía recaer sobre un único delantero. Por tanto, Théo Zidane parece haberse acoplado a la perfección a la plantilla, a lo que pide Iván Ania. El propio técnico asturiano ya había indicado en sala de prensa que tiene mucho fútbol en sus botas. El francés llegó procedente del Real Madrid Castilla y dio el salto al fútbol profesional de la mano del Córdoba. Tenía potencial y lo está demostrando. Su mejor nivel coincide con el del equipo, en la recta final del 2024. Una apuesta que ha salido bien por parte de la dirección deportiva y que seguirá creciendo a partir de enero. No ha sido fácil pues llegó sin experiencia en el fútbol profesional. Este año ha sido su debut en el fútbol profesional como el de muchos compañeros en la plantilla. Le faltaba coger esa madurez deportiva que parece haber emepezado a tocar. Aún tiene un amplío margen de mejora. Théo fue el hombre del partido ante el Castellón en El Arcángel con su magnífica actuación en la segunda mitad. Desde el banquillo, cambió el curso del encuentro y metió al Córdoba de nuevo en la pelea, y a punto estuvo de llevarse la victoria de forma épica tras remontar un 0-2 en contra. No empezó bien Théo en el equipo pero empezó a despuntar en noviembre y a demostrar su potencial. Ese gol ante el cuadro orellut fue su primer gol con el Córdoba desde que llegase el pasado verano. Le costó encontrar su sitio pues ha jugado tanto en el centro del campo como en la mediapunta. Curiosamente, en ambas posiciones ha logrado sacar su mejor versión aunque Iván Ania ha demostrado su predilección por ver al francés cerca del área , por detrás de la referencia. Normalmente, el rambleño Antonio Casas. Ha demostrado su peligro cerca del área y que tiene llegada. Tiene mucha progresión por delante, pero tiene mimbres para convertirse en un jugador fetiche para el club. Además, se ha desquitado de la presión del apellido Zidane . Siempre ha querido ser conocido por Théo y demostrar su potencial sin necesidad de recordar a su padre, una leyenda en la historia del fútbol. De momento, lo está consiguiendo y está dando la razón a la dirección deportiva que decidió apostar por él en verano.
