El FC Barcelona ha atravesado un inicio de temporada liguera prometedor, pero la evolución del equipo ha sido completamente diferente en los últimos meses. Tras una brillante arrancada, el conjunto azulgrana se encuentra ahora inmerso en una grave crisis de resultados, firmando la tercera peor primera vuelta de los últimos 20 años en LaLiga. Con solo 38 puntos tras 19 jornadas disputadas, los dirigidos por Hansi Flick están lejos de cumplir con las expectativas que se habían generado al principio de la campaña.
Esta racha negativa ha sido particularmente visible en los últimos encuentros, donde el Barcelona solo ha conseguido una victoria en sus últimos siete partidos de liga. Este bajo rendimiento ha sido determinante para que los catalanes cierren la primera vuelta con un balance de 38 puntos, un registro que no se veía en el Camp Nou desde hace más de dos décadas. De hecho, solo en dos ocasiones en los últimos 20 años el Barça ha tenido una puntuación más baja en este tramo de la temporada. Curiosamente, ambos antecedentes son bastante recientes.
La temporada 2020-21, bajo la dirección de Ronald Koeman, fue una de las más complicadas en la historia reciente del club. A pesar de la calidad de su plantilla, el Barça solo consiguió 37 puntos al final de la primera vuelta, uno menos que los obtenidos este año. Sin embargo, el año siguiente la situación empeoró aún más. En la temporada 2021-22, con Koeman aún en el banquillo, seguido por Sergi Barjuán y Xavi Hernández, el equipo solo acumuló 31 puntos en la primera vuelta, el registro más bajo de los últimos 20 años.
Por otro lado, las últimas dos temporadas con Xavi Hernández como entrenador ofrecieron una notable mejoría. En la 2022-23, el equipo logró 50 puntos en la primera vuelta, un rendimiento mucho más acorde con la historia reciente del club. Este año, a pesar de la estabilidad que parecía haberse alcanzado, el Barcelona no ha logrado mantener la consistencia y, al terminar la primera mitad de la temporada con 41 puntos, se encuentra con una crisis más profunda de la que muchos esperaban. De haber conseguido una victoria más en los últimos seis empates, el equipo habría sumado los mismos 41 puntos que en la temporada pasada, evitando así el pésimo balance actual.
Con este panorama, el FC Barcelona está obligado a mejorar en la segunda mitad de la temporada si quiere cumplir con sus objetivos en LaLiga y Europa. La presión sobre Hansi Flick y los jugadores aumentará, ya que el club no puede permitirse seguir cayendo en resultados negativos. La afición, que había soñado con una temporada competitiva, espera ver un cambio radical en el rendimiento del equipo para que el Barça pueda aspirar a los títulos que se le escaparon en las últimas temporadas. El futuro de Flick y la estabilidad del equipo dependerán de cómo se enfrenten a los retos venideros.