El Gobierno español ha concedido asilo político al opositor venezolano Edmundo González Urrutia, quien llegó a España el pasado 8 de septiembre. Esta decisión fue confirmada por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, quien destacó la libertad de movimiento que tendrá el dirigente para reunirse con quien desee.
Albares, en declaraciones a la prensa, explicó que se ha mantenido un desayuno de trabajo con González Urrutia, donde se abordaron temas relacionados con su situación personal y la crisis en Venezuela. El ministro también mencionó las conclusiones del último Consejo Europeo, que aboga por una transición pacífica y democrática en el país sudamericano.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha confirmado que Edmundo González Urrutia ha recibido el estatuto de asilo que había solicitado. Este proceso se notificará formalmente en los próximos días, permitiendo al opositor venezolano establecerse en España con garantías de protección.
Durante el desayuno de trabajo, Albares y González Urrutia discutieron no solo la situación personal del opositor, sino también la compleja realidad que enfrenta Venezuela. El ministro subrayó la importancia de la unidad europea en la búsqueda de una solución pacífica a la crisis, recordando que los 27 países miembros han solicitado el respeto a los derechos humanos y la liberación de todos los presos políticos en el país.
En cuanto a las intenciones de Edmundo González de regresar a Venezuela el 10 de enero para asumir la presidencia, el ministro Albares se mostró reservado sobre los detalles de su conversación. Sin embargo, reafirmó el compromiso de España y la Unión Europea de apoyar cualquier esfuerzo que busque una transición democrática en Venezuela.
González Urrutia, a través de su cuenta de X, también destacó la relevancia del documento del Consejo Europeo, que enfatiza la movilización de herramientas para respaldar la democracia en Venezuela. Este apoyo internacional es crucial en un momento en que el país enfrenta desafíos significativos en su camino hacia la estabilidad política.
