Estados Unidos es un país que muchos españoles anhelan visitar en algún momento de su vida. Imaginarse recorriendo el país americano de punta a punta viviendo escenas propias de las típicas películas es un sueño que algunos pueden hacer realidad. Este caso es el de Cris, que está viajando por Estados Unidos junto a su padre. Ella tiene un trabajo muy particular, es piloto de barcos de Fórmula 1. Solo 18 personas en el mundo trabajan en ello y Cris es la única mujer española. El viaje lo está realizando en moto y lleva más de 2.000 kilómetros a sus espaldas.
La aventura que está viviendo esta española es difícil de igualar. Está acudiendo a grandes competiciones de motor como la NASCAR y probando todo tipo de vehículos, la mayoría tan sorprendentes como espectaculares. Incluso se acercó hasta el 'Área 51', el lugar más extraterrestre del país. Aunque no se puede entrar al interior, mostró varios lugares ambientados en los alienígenas. En un viaje tan largo, tuvieron que realizar muchas paradas, algunas de ellas fueron en bares de carretera.
Cris entró en un restaurante clásico de carretera para desayunar. Estaba decorado como si fuera una película, con mucho colorido y con los típicos cuadros americanos. La carta tenía absolutamente de todo, aunque la mayoría era salado: "Se lleva mucho aquí lo de las tortillas francesas para desayunar". Los precios no eran nada excesivos, ningún plato de la página que mostró superaba los diez dólares, algo que alegró mucho a su padre: "Por fin algo de precio barato".
Esta española ironizó sobre lo saludable que eran los platos que aparecían en la carta: "Muy healthy todo, ¿no?". La comida la recibieron en platos de cartón. Finalmente, ella se decidió por pedir tortilla y tortitas. "Tortilla francesa, no es de estrella Michelin, pero se puede comer", confesó tras probar la tortilla. Para el final se dejó lo que más le gustó, las tortitas: "Del uno al diez, les pongo un diez". En total pagaron 27,44 dólares. La cuenta les llegó cuando seguían comiendo, sin pedirla. Sin embargo, este no fue el precio final, hay que añadirle la propina, algo habitual según el padre: "El 20%, no te escapas ni con alas".
Los españoles nos fijamos constantemente en la vida de los americanos, en sus costumbres, en su política y en su cultura. Sin embargo, ellos se centran solo en lo suyo y apenas conocen nada de España. Esto lo freflejó un estudiante español en el país norteamericano, que recogió en un video las sorprendentes preguntas que le hacían en Estados Unidos, algunas parecen difíciles de comprender. El español fue valorándolas de manera individual y comentando cada una de ellas. La primera de ellas fue: ¿Qué idioma habláis en España?
Otras traen consigo una confusión muy típica en Estados Unidos: ¿Coméis muchos tacos? Confundir a España con México y otros países latinos es muy habitual. El estudiante la valoró con un dos y pidió no confundir ambos países. También le preguntaban por el picante, cosa que tampoco le hizo excesiva gracia. No es la única confusión a nivel geográfica, ya que faltaba una de las grandes bombas: ¿Está España en Sudamérica? La respuesta del español fue "Dadles un libro de geografía, por favor". Tampoco supero el tres.