A pocos días de Nochebuena, cumplo con el ritual personal de elevar algunas peticiones al Niñito Dios con la esperanza de que pueda pasarle el recado al Padre Santo. Aquí vamos:
Por el presidente de la República, para que los ímpetus autocráticos no lo sigan distrayendo de su tarea fundamental de gobernar al país con responsabilidad, respeto y eficiencia.
Por la ministra Anna Katharina Müller, para que finalmente encuentre una ruta de la educación que permita reducir las crecientes brechas y rezagos de la enseñanza pública.
Por el ministro Nogui Acosta, para que se amarre los pantalones ante cualquier ocurrencia o “antojo” populista de Zapote que pueda socavar todavía más las finanzas públicas.
Por el ministro Mauricio Batalla, para que desista de las plazas públicas que organiza para inaugurar obras sin terminar y, en su lugar, le cuente al país cuál es su plan para combatir las presas.
Por el ministro Franz Tattenbach, para que se decida a acatar una vieja orden de la Sala Constitucional de devolver a manos del Estado 188 hectáreas del refugio Gandoca-Manzanillo.
Por la nueva presidenta ejecutiva de la Caja Costarricense de Seguro Social, para que cumpla la promesa de esta administración de comerse la bronca con las listas de espera.
Por los diputados del oficialismo, para que disuadan al mandatario de no perder más tiempo con los berrinches de los miércoles ni con su inservible ley jaguar.
Por los diputados de oposición, para que los triquitraques de la campaña política no los hagan caer en la tentación de paralizar el trámite de proyectos urgentes para el país.
Por los policías, para que el Ejecutivo los dote de los equipos y el adiestramiento requeridos para enfrentar la ola de homicidios que alcanzó niveles históricos en los últimos dos años.
Por la señora de Purral, para que su comunidad y tantas otras se libren del acecho del crimen organizado, la pobreza, el desempleo y la violencia intrafamiliar.
Por los pasajeros de tren, para que no se conviertan en estatuas de sal mientras esperan que este gobierno cumpla la promesa de desarrollar un servicio moderno y ágil.
Por la democracia, para que el ataque a mansalva lanzado desde Presidencia contra los órganos de fiscalización y los supremos poderes no logre desestabilizar la institucionalidad del país. Todo esto... te lo pedimos, Señor.