La solidaridad de los funcionarios de la Junta de Castilla y León permitirá que, en enero, la organización no gubernamental Anawim envíe un total de 3.757 gafas a Guinea-Bisáu para paliar las carencias que, en materia oftalmológica, sufre la población de diferentes zonas rurales de este país africano. Se trata de la segunda campaña navideña de solidaridad entre los empleados públicos puesta en marcha desde el pasado año por la Consejería de la Presidencia, cuyo titular, Luis Miguel González Gago, destacó el «doble objetivo» de «trasladar la importancia del cuidado de la salud visual y fortalecer los lazos de solidaridad internacional» con esta iniciativa. Así, desde el pasado 13 de noviembre y hasta el pasado viernes, los empleados públicos de la Junta pudieron aportar en puntos de recogida de las nueve delegaciones territoriales y en las sedes de cada Consejería en Valladolid las gafas de sol o graduadas en desuso, pero en buen estado, que tuvieran. Las gafas son recogidas por la ONG Anawim, con sede en Elche pero oficina en Valladolid, que tiene un programa específico de prevención y corrección de enfermedades oculares en Guinea Bisáu, país en el que las «largas horas» de exposición al sol provocan «graves problemas de vista en niños y ancianos», desde cataratas a traumatismos oculares e incluso ceguera, por lo que además de gafas graduadas, también se solicitaron y recogieron lentes para proteger del sol. De las 3.757 lentes recogidas, 2.407 son de sol sin graduar, lo que representa dos de cada tres gafas, mientras que 1.340 son graduadas de vista y una decena, graduadas de sol. Todas ellas tendrán «un impacto muy positivo en la salud de la población» de un país que ocupa el puesto 179 de los 189 países analizados en el índice de desarrollo humano y que sufre «una carencia importante de oftalmólogos». En su intervención ante los medios, recogida por Ical, González Gago agradeció la «solidaridad, compromiso y generosidad» de los empleados públicos en la segunda campaña de ayuda a un proyecto concreto de colaboración que la Junta pone en marcha en las fechas navideñas para incentivar que los empleados públicos colaboren, y que según el consejero, se mantendrá en el tiempo porque los funcionarios «necesitan cauces internos para manifestar su colaboración con el tercer mundo».