El diario Haaretz ha anunciado que Israel y Arabia Saudí han alcanzado la normalización de sus relaciones, dejando atrás su desconfianza mutua, para negociar la liberación de los rehenes restantes en Gaza y abriendo así una posibilidad para el fin del conflicto en la región.
Fuentes cercanas a la negociación entre las dos potencias han asegurado al medio israelí, enfrentado al ejecutivo de Netanyahu, que estas han tenido que ceder cierto terreno en sus postulados: por parte de Israel, por ejemplo, se ha cometido con el reino saudita a crear un "camino hacia un estado palestino", en vez de reconocerlo directamente, como pedía inicialmente la monarquía. Arabia Saudí, por su parte, aseguró que no normalizaría relaciones con Israel "hasta que no acabase el conflicto en Gaza", según informó The Jerusalem Post.
Ha sido el propio Netanyahu quien está llevando directamente las negociaciones, a través de su ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, contando con la intermediación de los Estados Unidos, tanto con la Administración Biden como con el que asumirá el cargo el próximo 20 de enero, Donald Trump.
Esto puede conseguir la creación de una oportunidad para la liberación de rehenes de Hamas en Gaza, ya que el propósito del reino arábigo es acabar con el conflicto y participar en la reconstrucción en la Franja, según el mencionado Haaretz, involucrando también a la Autoridad Palestina.
Según este medio, serían dos las fases de la desescalada de liberación de rehenes y alto el fuego que sucedería en Gaza. Sobre los cautivos, la primera fase involucraría la liberación de las mujeres militares israelíes, mujeres civiles, enfermos y mayores de 50 años, a cambio de que Israel libere a prisioneros palestinos.
Esto llevaría a la segunda fase, consistiendo en la paralización del conflicto en Gaza por un periodo no especificado de tiempo, haciendo Israel una retirada escalada hacia su territorio. Una vez completada, se firmará el acuerdo de normalización de relaciones entre las dos potencias.
Estas propuestas de acuerdo para la normalización han encontrado oposición, según Haaretz, en ciertas partes del gobierno israelí sobre la liberación de los rehenes, así como de la inclusión de la Autoridad Palestina en la reconstrucción de Gaza, por lo que hay dudas si la propuesta contará con el beneplácito gubernamental.