El Ilustre Colegio de Médicos de Madrid (Icomem) ha celebrado este martes elecciones para elegir a la Junta Directiva que dirigirá la corporación durante los próximos cuatro años, entre las tres candidaturas proclamadas. En estos comicios, los más de 50.000 colegiados podían optar por la lista continuista encabezada por el hasta ahora presidente del Colegio, Manuel Martínez-Sellés, y dos independientes lideradas por Tomás Merina, exdirector del Hospital de la Fuensanta, apoyada por el sindicato Amyts, y por la nefróloga Esther Rubio, de la Unidad de Hipertensión y Riesgo Vascular del Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda.
Finalmente, el vencedor ha sido Tomás Merina. La segunda posición es para Esther Rubio, y Martínez-Sellés tercero. Según los datos provisionales se han registrado 9.530 votos, de los que 4.475 fueron para la candidatura «Icomem para todos», encabezada por Merina (un 46,9%); 2.393 para la candidatura «Primero, Médicos», de Martínez-Sellés; y 2.580 para «Médicos como Tú», de la doctora Rubio.
Tomás Merina, licenciado en Medicina, Ciencias Políticas, Sociología e Historia del Arte y director del Hospital de La Fuensanta durante 30 años, encabezó «Icomem para todos» con el objetivo de convertir el Colegio en la voz que defienda la profesión y a los profesionales de todos los niveles.
En una reciente entrevista concedida a LA RAZÓN, Merina señaló que se presentaba a las elecciones del Colegio de Médicos de Madrid para impulsar «el renacimiento» de la profesión, con «ilusión por devolver a los médicos el orgullo de pertenencia a una profesión que se ha devaluado en exceso». Aunque no renegaba de sus vínculos con los sindicatos, defendía que su proyecto es «plural».
Al ser preguntado sobre la polémica acerca del intento de alguna empresa por controlar el Colegio, indicó que «nosotros somos transparentes en nuestros acuerdos y nos presentamos con independencia de cualquier tipo de interés comercial. Nuestra candidatura se financia con aportaciones de los candidatos y, si gana, será sin hipotecas. Somos gente decente», señaló.
Sobre la acusación de sus rivales de ser un apéndice de Amyts, el sindicato que hostiga a Díaz Ayuso desde el lado sanitario, no dudó en afirmar que «he sido empresario en el sector sanitario madrileño durante más de 30 años. He pertenecido a la junta directiva de la patronal de hospitales mucho tiempo. Tengo el apoyo de Amyts, que es el sindicato mayoritario entre los médicos, de CSIT-SIME (otro sindicato médico) y de otras organizaciones profesionales. Sus apoyos no me condicionan. Tenemos vocación de colaborar con la Consejería y el Ministerio», aseveró.
Merina se mostró en contra de que el Colegio de Médicos se comporte como un sindicato, porque «tienen espacios y competencias diferentes», y manifestó que la labor de la institución es «promover la mejor praxis médica para la correcta atención a los ciudadanos».
Respecto a los proyectos que tiene previsto poner en marcha durante su presidencia, aseguró que «necesitamos recuperar la Atención Primaria y queremos aportar soluciones a la Consejería. En la Hospitalaria, los profesionales deben tener el reconocimiento correspondiente a su esfuerzo». También informó de que su candidatura ha firmado un acuerdo con la Facultad de Sociología de la Universidad Complutense para crear un observatorio de la profesión.
Empresario desde el Hospital Fuensanta, Tomás Merina aseguró al ser preguntado sobre si es necesario defender a los médicos de la privada frente a las presiones empresariales que «el médico se ha quedado demasiado alejado de las decisiones estratégicas, debe recuperar posiciones».
Finalmente, en la entrevista mostró su compromiso de que las cuotas a los colegiados estén entre las más bajas del país. No obstante, indicó la necesidad de hacer una auditoría, porque «el 2024 me temo que haya sido catastrófico». Al respecto, declaró que Martínez-Sellés prometió cuota «cero», no cumplió y se va con las cuentas exhaustas.
Las otras candidaturas
Esther Rubio fue la cabeza de lista de la candidatura «Médicos como Tú», que fijaba como meta construir «una institución útil, cercana y transparente, que represente verdaderamente a quienes la integran» y alejada «de intereses políticos, económicos o sindicales».
El cardiólogo Manuel Martínez-Sellés ha presidido el Icomem durante los últimos cuatro años, tras alzarse con la victoria en los comicios de septiembre de 2020 con el 52% de los votos, frente al 48% congregado por sus otros tres contrincantes. Relevó en el cargo a Miguel Ángel Sánchez Chillón, que recabó el 30,9% de los apoyos.
