El aspirante se alza como ganador frente al actual dirigente del Icomem, Manuel Martínez-Sellés, y deja atrás con diferencia a la otra candidata, Esther Rubio. Los comicios han estado marcados por dimisiones en la directiva del hasta ahora presidente, criticado por falta de transparencia
'Succession' en el Colegio de Médicos de Madrid: tres candidaturas, una dimisión explosiva y transparencia en entredicho
Manuel Martínez-Sellés pierde el control del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid, el órgano que reúne a los más de 50.000 facultativos colegiados que hay en la región. El actual presidente queda por debajo de sus oponentes, de los que ha salido airoso Tomás Merina, exgerente del hospital privado Fuensanta en Ciudad Lineal. Martínez-Sellés tomó el poder del Icomem en 2020 y tras desbancar a su predecesor, de corte más progresista. La suya era una opción más conservadora. Ahora, estos resultados se lo arrebatan. La otra candidata, la nefróloga del hospital público Puerta del Hierro en Majadahonda, Esther Rubio, ha quedado en segundo lugar. También ha habido 21 respuestas en blanco y otras 61, nulas. Pero esta ha sido una jornada electoral de la que casi nadie sabía qué esperar.
Con más participación que en los pasados comicios y un total de 9.530 votos contabilizados este martes, Merina gana con 4.475 papeletas seguido de Rubio, que se hace con 2.580 apoyos. Luego queda el presidente hasta la fecha, que aunque consigue 2.393 votos queda por debajo de sus dos adversarios. Al contrario de lo que suele decirse, esta vez la suerte no estaba echada. Manuel Martínez-Sellés lo tenía difícil, ya que había sido duramente criticado tanto por sus contrincantes como por sindicatos o algunos colegiados por una supuesta opacidad en sus cuentas económicas.
De hecho, la que era su vicepresidenta hasta hace unos días, Luisa González, dimitió precisamente por una supuesta “falta de transparencia” en la gestión monetaria de Martínez-Sellés. El Colegio de Médicos respondió poco después a las acusaciones a través de un comunicado, en el que se negaron las afirmaciones de su excompañera y se aseguró que “carecían de fundamento”. “Desde el inicio de este mandato la vicepresidenta tuvo acceso pleno a toda la documentación y cuentas del Colegio, en igualdad de condiciones con el resto de los miembros de la Junta Directiva”, sentenciaron. Aún así, la candidatura de su presidente quedó inevitablemente dañada.
Martínez-Sellés es jefe de la sección de Cardiología en el Hospital Universitario Gregorio Marañón y sus contrincantes Merina y Rubio, antiguo gerente del hospital privado Fuensanta en Ciudad Lineal y nefróloga del hospital público Puerta del Hierro, respectivamente. A Tomás Merina le vincularon desde el inicio con el sindicato Amyts, mayoritario entre los médicos de Madrid, pues tras una consulta a sus afiliados optaron por apoyarle públicamente. A la nefróloga en Majadahonda, en cambio, le recriminaron que su equipo haya nacido de un movimiento concreto -el de la estabilización de interinos- y no tenga “un proyecto sólido” para todas las áreas del Icomem.
Ambos trataron de deshacerse de esos estigma y negaron que les influyeran. Durante este último mandato ha habido varias novedades, como la reducción de la cuota que pagan los colegiados, obligados a inscribirse, o una ambiciosa reforma de las instalaciones de la entidad. Que conllevó, a su vez, una cuantiosa inversión. Cada uno de los candidatos tuvo tiempo para explayarse en sus propuestas, especialmente en el debate a tres celebrado una semana antes de los comicios y en el que también soñaron los reproches.
El escrutinio se ha estado actualizando durante toda la jornada vía streaming, y ya al caer la tarde la suerte sí estaba echada. Los resultados en tiempo real se iban retransmitiendo a través de gráficos que mostraban el porcentaje de votos en el momento en cada hospital. La participación ha subido respecto a las últimas elecciones, en las que Martínez-Sellés logró la victoria frente a Miguel Ángel Sánchez Chillón, entonces presidente del Icomem. Los clínicos de la región han ido registrando sus votos, diferenciados por cada uno de ellos.
Hay 39 puntos de votación repartidos por todo el mapa madrileño. El Hospital 12 de Octubre, el Hospital Infantil Niño Jesús, el Hospital Universitario de Torrejón, el Hospital Universitario HM Sanchinarro, el Hospital Universitario Fundación Alcorcón, el Hospital General Universitario Gregorio Marañón, el Hospital Universitario de Fuenlabrada, la Clínica CEMTRO, el Hospital Universitario Ramón y Cajal, Hospital Ruber Internacional, el Hospital Universitario de Puerta del Hierro, el Hospital Universitario Infanta Cristina, el Hospital Universitario Severo Ochoa, el Hospital Universitario Clínica la Luz o el Hospital Universitario HM Montepríncipe son algunos de ellos.
Pero la lista sigue y es extensa: también puede registrarse el voto en el Hospital Universitario HM La Moncloa, el Hospital Universitario del Tajo, el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla, el Hospital Universitario La Paz, el Hospital Universitario Rey Juan Carlos, la Clínica Universidad de Navarra, el Hospital Universitario San Rafael, el SUMMA112, el Hospital Viamed Santa Elena, el Hospital Universitario de Getafe, Hospital Universitario La Princesa, Hospital Clínico San Carlos, el Hospital Universitario Infanta Leonor, el Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, Hospital Ruben Juan Bravo, el Hospital Universitario Vithes la Milagrosa, Hospital Universitario Príncipe de Asturias, el Hospital Universitario Sanithas La Zarzuela, el Hospital Universitario Sanithas La Moraleja o el Hospital Universitario del Henares. El resto de opciones son Internet o en las sedes colegiales como el Gran y el Pequeño Anfiteatro o en la de Aurora Jiménez Díaz. Finalmente, los colegiados han decidido.
