El 2024 se perfila como un año revolucionario en el ámbito de la ciencia, con descubrimientos que se extendieron por distintas temáticas. Sin embargo, uno de los hitos más significativos fue en el campo del envejecimiento. Científicos descubrieron que los humanos envejecen en ráfagas. ¿Qué quiere decir esto? Que hay dos momentos clave en la vida de las personas en los que la vejez se siente de manera significativa.
Los científicos descubrieron que las personas envejecen en ráfagas. (Foto: Unsplash)
Según el sitio de National Geographic, una investigación científica, que contó con la participación de 108 voluntarios de diversas edades, permitió a los científicos realizar un seguimiento detallado de cómo cambian las sustancias bioquímicas y los microbios en el cuerpo humano a lo largo de los años.
Los resultados indican que existen dos momentos críticos en los que el cuerpo humano parece envejecer más rápidamente: alrededor de los 44 años y luego al llegar a los 60 años.
Durante la mitad de los cuarenta, tanto hombres como mujeres experimentan un cambio significativo en cómo sus cuerpos manejan aspectos cruciales como las enfermedades cardiovasculares y la metabolización de sustancias como el alcohol, las grasas y la cafeína. Al entrar en la sesentena, se observan cambios en la regulación inmunitaria y en el metabolismo de los hidratos de carbono.
Este estudio abrió nuevas preguntas sobre cuánto de estos cambios se deben a factores biológicos intrínsecos y cuánto podría atribuirse a los estilos de vida, particularmente dado que los años cuarenta suelen ser un período de alto estrés y consumo elevado de alcohol.
La idea de que envejecemos por "rachas" añade una dimensión fascinante y sorprendente al estudio del envejecimiento, y desafía muchas de las nociones previas sobre cómo y cuándo nuestro cuerpo comienza a mostrar signos de los años.
La investigación asegura que los adultos envejecen más a los 44 años y después a los 60 años. (Foto: Freepik)
La revelación de que el envejecimiento ocurre en etapas claramente definidas plantea importantes preguntas sobre cómo podemos prepararnos mejor para estos períodos críticos.
Este conocimiento abre la puerta a estrategias que podrían mitigar los efectos del envejecimiento y mejorar la calidad de vida durante estas transiciones. Algunas medidas que podrían considerarse:
