El ministro de Desarrollo e Inclusión Social, Julio Demartini, quien se salvó de ser censurado por el mismo caso de Qali Warma, se mostró sorprendido cuando se enteró de que la casa del vocero presidencial, Fredy Hinojosa, fue allanada por la Fiscalía. Ante esto, pidió a la entidad fiscalizadora que explique públicamente los fundamentos que llevaron a dicha acción. De lo contrario, lo calificaría como "un fuerte componente mediático".
"(Estoy) realmente sorprendido, no por la investigación, porque nosotros mismos como ministerio y como programa (Qali Warma) hemos solicitado y dado todas las facilidades a la Fiscalía para que investigue, caiga quien caiga (...) Lo que me llama mucho la atención es saltar a un allanamiento de la casa del vocero presidencial y sería importante que la Fiscalía nos informe oficialmente cuáles son los hechos que han llevado a esta decisión", dijo en declaraciones para RPP.
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Asimismo, precisó que la entidad debe hacer público los motivos que llevó al allanamiento de la vivienda de Hinojosa porque si no "se estaría perdiendo el objetivo de que los delincuentes (los implicados en las conservas en mal estado) sean sancionados".
Ante el allanamiento de su vivienda, el Ministerio Público solicitó su detención preliminar, sin embargo, esta no pudo concretarse debido a la reciente ley promulgada por Dina Boluarte e impulsada por el Congreso, que derogó la detención preliminar en casos de no flagrancia.
Fredy Hinojosa sería investigado por los presuntos delitos de organización criminal, colusión agravada, tráfico de influencias y otros. La diligencia a su casa se realizó en el distrito de Pueblo Libre y dicha medida también fue impuesta contra la empresa Frigoinca, funcionarios de la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (DIGESA) y otros 17 inmuebles.
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De acuerdo con el documental Punto Final, cuando la presidenta Dina Boluarte ocupaba el cargo de ministra de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), Hinojosa se desempeñaba como jefe de Qali Warma y es precisamente durante ese tiempo que la empresa cuestionada, Frigoinca, tuvo crecimiento como fabricante de alimentos con importantes contratos para la distribución de las cuestionadas conservas Don Simón a los centros educativos.
