El Barça sigue en el foco por la inscripción de los dos únicos fichajes que hizo este pasado verano: Dani Olmo y Pau Víctor. Ambos jugadores están registrados en LaLiga hasta enero, y el tiempo empieza a echarse encima. La intención del club, obviamente, es hacer definitiva su constancia en el campeonato hasta final de temporada.
Y para eso, todavía tiene que liberar fairplay financiero. El propio Joan Laporta ha admitido este mediodía que está "trabajando en varias vías" para obtener luz verde de la patronal del fútbol español. Una de ellas es apelar al "margen salarial que ha dejado Ter Stegen", cuya baja es de larga duración hasta final de temporada. En palabras del presidente, confía en que "sirva para ambos".
Otra opción es la "vía judicial", por si fuese necesario pedir medidas cautelares para mantener a los jugadores en la plantilla mientras se halla una solución definitiva. Sin embargo, en el club esperan no tener que llegar a ese punto.
El propio Laporta ha aludido al nuevo contrato con Nike como "una línea de conseguir ingresos" para cumplir las normas financieras. "El contrato es fundamental, firmaremos el mejor contrato con una marca deportiva y nos daría el 'fair play' necesario". Un acuerdo que se votará este sábado en la Asamblea de la entidad catalana.
La directiva, además, trabaja en cerrar otras operaciones que permitan aumentar ingresos para poder lograr ambas inscripciones, que a día de hoy son un asunto de estado, pues el Barça continúa excedido.
