El ministro de Finanzas israelí, el colono Bezalel Smotrich, reiteró este martes que el Gobierno está trabajando para crear “continuidad territorial” entre Jerusalén y los asentamientos ilegales en Gush Etzion, en Cisjordania ocupada, con el fin de presentar al presidente electo de EEUU, Donald Trump, un plan de soberanía israelí.
“No permitiremos que los árabes separen (el bloque de asentamientos de) Gush Etzion y Jerusalén, ni les permitiremos establecer un Estado palestino que pondría en peligro nuestra existencia aquí”, escribió este martes Smotrich en X.
Sus palabras llegan después de que la prensa israelí dijese que el ministro de extrema derecha está “preparando el terreno” de cara a la segunda presidencia de Trump y presionando para la anexión de más tierra palestina.
“Seguimos trabajando para fortalecer nuestra presencia sobre todas las regiones de nuestro país”, concluyo Smotrich, en una alusión al territorio ocupado de Cisjordania, que los israelíes denominan a través de los topónimos bíblicos de ‘Judea y Samaria’ e incluyen como parte de Israel.
Desde principios de 2024, el Gobierno israelí ha adelantado planes para construir un total de 8 mil 720 viviendas en Cisjordania ocupada, a los que hay que sumar más de 780 que se están debatiendo este diciembre, denunció ayer Peace Now, oenegé israelí que monitoriza la expansión de asentamientos.
A finales de junio, el gabinete de Gobierno, a propuesta de Smotrich, también aprobó la construcción de nuevos puntos de asentamiento: tres de ellos anexionando los ‘puestos de avanzada’ ilegales de Mahane Gadi, Givat Hanan y Kedem Arava a colonias colindantes; y mediante la construcción de nuevas viviendas en los asentamientos de Gvaot, Yakir y Neria.
Además, batiendo todos los récords, Israel ha declarado este año más de 2 mil 300 hectáreas en Cisjordania ocupada como tierras estatales, mecanismo que emplea, junto a la denominación de reservas naturales y áreas de entrenamiento militar, para expulsar a la población palestina y controlar el territorio.
