Bill Gates, el cofundador de Microsoft, fue una de las figuras más influyentes en el mundo de la tecnología y uno de los hombres más ricos del planeta, con una fortuna de unos 166 mil millones de dólares. Sin embargo, su vida no es perfecta: su peor arrepentimiento se debe a su trabajo.
A pesar de haber construido una de las empresas más exitosas del mundo, el multimillonario confesó que durante los primeros años, su enfoque hacia su profesión era mucho más exigente de lo que debería haber sido.
No solo era conocido por trabajar sin descanso, sino que también esperaba lo mismo de su equipo. Años después, esta perspectiva cambiaría por completo, y ahora Gates comparte lo que considera su mayor error para que el resto no cometa la misma equivocación que él.
El consejo definitivo de Albert Einstein para alcanzar la felicidad plena
En una charla a graduados de la Universidad del Norte de Arizona, Bill Gates reveló que, en sus comienzos, no era capaz de permitirse a sí mismo, ni a sus empleados, tomar un descanso.
"Cuando tenía su edad, no creía en las vacaciones. Ni siquiera creía en los fines de semana", confesó. Su visión era clara: cuanto más trabajara, más rápido lograría el éxito. Pero pronto se dio cuenta de que este enfoque no era sostenible en el tiempo.
"Miraba todos los días el estacionamiento de Microsoft para ver quién se iba temprano y quién se quedaba hasta tarde", recordó el magnate.
Sin embargo, con el paso del tiempo y al convertirse en padre, Gates comprendió que esta intensidad no solo afectaba su vida personal, sino que tampoco era la mejor forma de lograr resultados a largo plazo.
Hoy, Bill Gates enfatiza la importancia de ser amable con uno mismo y de reconocer que el descanso también es esencial para el éxito. "No eres ningún vago si te relajás un poco", reflexionó. Otros de sus consejos valiosos para enfrentar desafíos son:
Aprendé a gestionar tu tiempo de manera efectiva: a lo largo de los años, Gates aprendió de su amigo Warren Buffett que "sentarse a pensar" puede ser más valioso que estar constantemente ocupado. También interiorizó que no siempre se trata de llenar cada minuto de la agenda, sino de encontrar tiempo para reflexionar.
Sé comprensivo y paciente: Gates reconoce que la paciencia es fundamental para el éxito. Sostiene que además de ser un buen líder, es importante ser paciente con uno mismo y con los demás para lograr resultados sostenibles.