Sergio Herrera ha protagonizado una de las imágenes más curiosas de esta última jornada de LaLiga. El portero de Osasuna es una de las figuras clave en un equipo que este año marcha como octavo clasificado en la competición doméstica. Gran parte del éxito de el equipo pasa por tratar de encajar el menor número de goles posible, ya que por el momento éstos siguen siendo superiores a los tantos que el equipo ha conseguido anotar.
Los veintidós goles que el equipo rojillo ha marcado esta temporada le han valido para ganar un total de seis partidos, que junto con sus siete empates hacen que sume actualmente un total de veinticinco puntos para un equipo que aspira a jugar competición europea el próximo año. A pesar de que Sergio Herrera no tiene mucho que aportar al equipo en este sentido, las paradas del portero español le han dado ya más de un punto a Osasuna en la presente temporada.
Sin ir más lejos, las diferentes paradas del portero fueron fundamentales para que el equipo navarro lograra sacar un punto en su visita al RDCE Stadium del pasado sábado. Un partido en el que ambos equipos pudieron disfrutar de un gran número de oportunidades, que, sin embargo, no se vieron traducidas en goles. Ambos equipos empataron a cero, y la actuación de ambos guardametas fue decisiva para mantener este empate sin goles en el marcador.
El portero de Osasuna se ha convertido en uno de los protagonistas del pasado fin de semana en LaLiga. El guardameta del equipo navarro dio muestras de su sorprendente manía sobre el terreno de juego del RDCE Stadium durante el partido que enfrentó a su equipo con el Espanyol el pasado sábado por la tarde. Unas imágenes que no tardarían en correr como la pólvora por las redes sociales, y que sin duda darán mucho que hablar. En ellas se puede apreciar cómo el portero de Osasuna se golpea con fuerza contra uno de los palos que forman su portería. La fuerza del impacto es equivalente al movimiento del poste, que comienza a zarandearse al recibir el golpe con la cabeza del portero, haciendo que incluso se llegue a mover la red de la portería.
Además de por este sorprendente cabezazo, Sergio Herrera volvió a demostrar una vez más el buen estado de forma en el que se encuentra actualmente. Sus intervenciones fueron clave para que el equipo consiguiera un valioso punto a domicilio, logrando hasta tres paradas de gran mérito que frustraron los peligrosos intentos del Espanyol. Tras el encuentro, todavía pletórico tras su gran actuación; Sergio Herrera no dudó en bromear sobre su curiosa manía durante la entrevista al final del partido.
Ante la pregunta de la periodista de DAZN que se encargó de entrevistarle tras el encuentro frente al Espanyol, Sergio Herrera decidió responder de esta divertida forma: “Nada, bueno… hay que celebrarlo, ¿no?”, haciendo referencia al hecho de que para él una buena parada es tan importante como un gol puede serlo para un delantero. Para el portero de Osasuna, estos remates de cabeza dirigidos a la madera de su portería, son la forma que tiene de celebrar el hecho de haber conseguido una gran patada. “Ya que no puedo meter goles, pues hay que también subirse el ánimo de vez en cuando”, bromea el guardameta rojillo. Para Sergio Herrera es tan sólo un gesto anecdótico: “Son reacciones que quedarán para los highlights y poco más”, un comentario que despertó las risas de la periodista.