Los fabricantes de automóviles chinos, que antes estaban completamente enfocados en los vehículos eléctricos, ahora están recurriendo a los híbridos como una forma de mantenerse competitivos en Europa. La marca china Lynk&Co, filial del Grupo Geely —que también es propietario de Volvo, Lotus o Smart—, se centrará en los híbridos enchufables en Europa en lugar de apostar por los autos totalmente eléctricos, ya que los sistemas híbridos no están siendo afectados por los aranceles de la Unión Europea sobre los vehículos eléctricos de batería fabricados en China. Estos aranceles, que van desde el 17% hasta más del 35% en función de la participación gubernamental del Ejecutivo de Xi Jinping y el grado de cooperación en la investigación, se suman al impuesto de importación existente del 10%. Sin embargo, las medidas no se aplican a los híbridos, lo que crea una oportunidad para que fabricantes como BYD, Geely, Chery o SAIC apunten a un segmento de mercado en crecimiento. Los híbridos están ganando popularidad en Europa y son ya tecnología de propulsión mayoritaria. Los compradores los ven como un punto intermedio práctico entre los motores de combustión tradicionales y los modelos totalmente eléctricos. Este cambio ha dado a los fabricantes chinos un nuevo enfoque. Los analistas predicen que las exportaciones de híbridos enchufables (PHEV) chinos a Europa crecerán un 20% este año y aún más rápido en 2025. Entre julio y octubre, las exportaciones de vehículos híbridos a Europa se dispararon y el Viejo Continente enviaron más de 65.000 unidades, más del triple del volumen registrado en el mismo período de 2023. Los híbridos ahora representan el 18% de las ventas de vehículos chinos en Europa, en comparación con el 9% a principios de este año. Mientras tanto, los vehículos totalmente eléctricos han experimentado una ligera disminución en su participación de las exportaciones.