El Parlamento valenciano intenta retomar las comisiones en enero y febrero, muchas de ellas paralizadas desde antes de las vacaciones de verano, cuando PP y Vox rompieron el gobierno y dejaron a Carlos Mazón en minoría
El PP bloquea las comparecencias del 'politburó' de Carlos Mazón para explicar las horas clave de la DANA en las Corts
En la XI legislatura el Parlamento valenciano camina a paso de caracol. La DANA del pasado 29 de octubre alteró los plazos de la Cámara, que en el último trimestre debería estar debatiendo los presupuestos y la ley de acompañamiento, pero en su lugar las Corts Valencianes se han convertido en un erial. Apenas hay plenos, tampoco comparecencias, y algunas comisiones llevan un semestre paralizadas, desde que PP y Vox aprobaron el paquete de cinco leyes regresivas de golpe.
La ruptura del PP con Vox y los cambios en el Consell de Carlos Mazón, coincidiendo con el verano, ya retrasaron una actividad que las inundaciones, con otra crisis de Gobierno, han terminado de alterar. El Parlamento autonómico debería estar debatiendo los presupuestos o las iniciativas de la oposición, que llevan tiempo congeladas porque no se convocan las sesiones. La Mesa, que preside Vox, acordó habilitar enero para realizar comisiones, con la idea de que para entonces el Ejecutivo tenga un proyecto de Presupuestos y una ley de medidas fiscales para debatir. La DANA dejó caducado el proyecto de presupuestos para 2025, que iba a presentarse el 30 de octubre, y ahora la consellera de Hacienda ha confirmado que trabajan contrarreloj en una nueva norma adaptada a las necesidades.
PP y Vox no parecen tener prisa en determinadas cuestiones. Por ejemplo, en que los consellers comparezcan para explicar sus proyectos, que no será hasta el próximo 20 de diciembre, un mes después de su toma de posesión. Tampoco en convocar la Comisión de Coordinación para abordar las comparecencias de los tres secretarios autonómicos de Presidencia, el núcleo duro de Mazón, para dar cuenta de la gestión informativa de la catástrofe. El PSPV lleva un mes reclamando esta sesión y la comisión, presidida por el PP, hace oídos sordos. El reglamento de las Corts marca que las comisiones legislativas tienen que reunirse una vez al mes, pero la mayoría conservadora pasa de esta cuestión. Cinco meses de inestabilidad en el Ejecutivo autonómico han cambiado la agenda parlamentaria.
Entrado diciembre, el Parlamento autonómico ha puesto en marcha una batería de sesiones, casi dos por día, para recuperar el tiempo perdido y abordar iniciativas relacionadas con la DANA. En noviembre solo se celebró una comisión, la de industria, comercio y turismo el día 19, que llevaba sin reunirse desde el 9 de julio, cuando compareció el secretario autonómico de Industria. Solo se ha convocado ocho veces desde las elecciones de mayo de 2023. Otra ausencia llamativa es la de Educación, donde el conseller Rovira compareció el miércoles con una retahíla de exabruptos; la comisión llevaba sin convocarse desde el 10 de junio, pese a las protestas de la oposición. Esa sesión fue la que abordó la ley educativa del Consell, que ahora está en el Constitucional a raíz de un recurso impulsado por Compromís.
Otra comisión que tampoco se convoca es la que tiene que ver con la Radiotelevisión Pública valenciana, À Punt. Desde que se aprobó la ley en junio, que cambia las mayorías, no se ha citado a los parlamentarios para nada relacionado con ella. Tras meses retrasando la presentación de candidatos al Consejo de Administración, pese a que la ley establecía que fuera en el plazo de un mes, el Pleno de las Corts de la próxima semana votará a los integrantes del órgano, todos propuestos por PP y Vox.
Sí se han abordado medidas en las que Presidencia tenía gran interés, y que se retrasaron, precisamente, por el cambio de posición de Vox, que decidió durante un instante en verano actuar como oposición al Ejecutivo del que habían salido. Es el caso del 'Plan Simplifica' un decreto tramitado como proposición de ley que se aprobó el 29 de noviembre pese a pasar la primera ronda en Corts en julio. El texto, que se promocionó como una herramienta para reducir la burocracia, ha terminado siendo un coladero de reformas del PP en materias dispares como el urbanismo, la transparencia o los servicios sociales. El decreto resulta una imagen de la forma de gobernar que ha adoptado el PP de Mazón: perdido el apoyo parlamentario, tras la aprobación del primer paquete legislativo, se gobierna a golpe de decreto. También se han activado las comisiones de Medio Ambiente y Obras Públicas, temas candentes en la legislatura, que analizarán los proyectos del conseller Vicente Martínez Mus, el más activo durante la DANA, sobre cambios en el modelo territorial autonómico.