La minería constituye una parte esencial del Producto Bruto Interno (PBI) de Perú, por lo que se posiciona como una de las actividades económicas más relevantes en el país. Este sector ha contribuido aproximadamente con un 8,85% anual a la producción nacional en los últimos 10 años, lo que demuestra su importancia en el desarrollo económico del país. Además, ha impulsado los ingresos tributarios y el empleo calificado, así como se ha establecido como el principal impulsor del desarrollo a nivel regional.
Sin embargo, la minería presenta varias cuestiones que debe mejorar, debido al gran impacto y las externalidades que genera en el espacio donde se desarrolla. En algunas ocasiones, la zona y las comunidades que viven allí se ven afectadas por los riesgos ambientales y letales que causa la extracción de minerales. A continuación, te contaremos los retos y cambios que debería hacer la minería en Perú el próximo año.
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La preservación del medio ambiente es uno de los temas centrales en la agenda industrial, donde se reconoce que el avance debe ir acompañado de un fuerte sentido de responsabilidad a raíz de las consecuencias que genera el cambio climático. Por ello, surge la necesidad de mitigar los efectos negativos e implementar prácticas innovadoras, lo que se vuelve crucial para lograr un equilibrio entre el desarrollo económico y la conservación del medio ambiente.
La creciente aparición de conflictos sociales resalta la urgencia de consolidar el compromiso hacia las comunidades, por lo que se deben promover vínculos basados en la transparencia y la responsabilidad social entre la empresa minera y los ciudadanos. El asistencialismo y la transaccionalidad son elementos del proceso, pero no deben considerarse como el objetivo final del ecosistema.
La atracción de capital y financiamiento, así como la implementación de tecnologías innovadoras, resulta fundamental para impulsar los proyectos estratégicos que posicionen a Perú entre los principales productores de minerales a nivel mundial. Así, se fortalecerá la capacidad del país como extractor de cobre, oro, plomo y litio. Además, en este contexto, el respeto a los marcos regulatorios creará un ambiente propicio para la inversión, lo que a su vez fomentará la llegada de nuevos proyectos y capitales al país.
La digitalización, también conocida como Minería 4.0, necesita seguir avanzando en su desarrollo para transformar las operaciones del sector a través de la optimización de procesos, el monitoreo en tiempo real, simulaciones y la creación de algoritmos. Este proceso se complementa con la transición hacia energías renovables, que impulsa la descarbonización y establece un precedente en la incorporación de soluciones sostenibles en la producción minera.
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Comex Perú indicó que las exportaciones mineras podrían superar los US$40.000 millones al cierre de 2024, siempre que no se presenten crisis políticas ni conflictos sociales. Las proyecciones se justifican porque, entre enero y septiembre de 2024, las exportaciones alcanzaron más de US$33.000 millones. De continuar con este ritmo, se anticipa la posibilidad de superar la marca histórica en el cierre del año.
