Volvimos a correr el Rally del Golfo al Pacífico, que en su edición 23 fue diferente en todos los aspectos. Por primera vez se llevó a cabo la Copa Manzanillo, por lo tanto, se dio un cambio de sede hacia los estados de Jalisco y Colima, teniendo como punto de arranque la ciudad de Guadalajara y como meta final el puerto de Manzanillo.
También, en esta ocasión, el rally duró un solo día, dando inicio en punto de las 8:00 horas del pasado viernes 22 de noviembre con el primer auto arrancando exactamente a esa hora para que posteriormente arrancaran los demás competidores en intervalos de 30 segundos.
La primera etapa consistió en salir de Guadalajara y llegar al Pueblo Mágico de Tapalpa, también en el estado de Jalisco, en un lapso aproximado de dos horas y media. El centro de Tapalpa fungió como la meta intermedia, así como punto de descanso para cada uno de los participantes durante 20 minutos.
A partir de las 10:55 horas cada auto salió del centro de Tapalpa con dirección a San Gabriel Apango, Sayula, para tomar la carretera Guadalajara - Colima, teniendo el final de la etapa en una parada a comer con una vista espectacular al Nevado y el Volcán de Colima.
Fue cerca de esta zona, cuando nuestro auto encendió una alarma, recordándonos que el momento de hacerle servicio con cambio de aceite y filtro, estaba cerca. Afortunadamente, veníamos preparados para distintos escenarios, por lo que fue el mejor momento para utilizar el tratamiento especial para motor de SeaFoam, mismo que nos ayudó a mantener el motor limpio, lubricado y funcionando sin ningún problema por todavía varios miles de kilómetros antes de regresar a casa y poder darle el mantenimiento adecuado.
La siguiente etapa abarcó las poblaciones de Suchitlán, El Remate, La caja Comala y la ciudad de Colima. Aquí la meta intermedia fue una plaza comercial donde incluso hubo exhibición de autos. A las 16:30 horas arrancó la última etapa hacia el monumento al Pez Vela en el centro del puerto de Manzanillo, donde se encontraba la meta final tras cerca de nueve horas de conducción regulada.
A diferencia de los rallies de velocidad, que como su nombre lo dice, se trata de llegar lo más rápido posible del punto A al punto B, el Rally del Golfo al Pacífico es de regularidad. El objetivo es cumplir diferentes etapas a una velocidad determinada para pasar por cada una de los puntos de control en el tiempo exacto, teniendo todos los datos necesarios en el libro de ruta y en las aplicaciones oficiales controladas por medición satelital.
Las velocidades que se piden cumplir no son altas, al contrario, se encuentran en un rango de entre los 50 y 90 km/h, ya que el objetivo es cruzar cada uno de dichos puntos de control en el tiempo justo que se indica. Si se cruza antes o después, son suman puntos de penalización, dependiendo cuál haya sido ese tiempo. Al final, el ganador es el que tenga la menor cantidad de puntos de penalización.
Tenemos que decir que este rally estuvo lejos de ser perfecto para nosotros, ya que la primera etapa fue en donde más errores cometimos al tratar de ajustar y poner en tiempo los equipos que se utilizan durante toda la competencia. Además del libro de ruta, viajamos con dos aplicaciones disponibles para teléfonos inteligentes y tabletas, que van marcando el tiempo, la ruta, la velocidad, y hasta los segundos de desfase en cada uno de los puntos de control. Una vez arreglados los diferentes problemas con la tecnología, tratamos de mejorar las siguientes etapas y sí, podemos decir que en términos generales, a partir de ese momento el objetivo se cumplió.
Por un lado, son la destreza, comunicación y comprensión entre piloto y navegante, lo necesarios para hacer un buen rally, el otro elemento indispensable es el auto y la tecnología. Desde ese lado no hubo queja alguna, ya que se trató del Acura Integra, pero en la versión más deportiva: Type S. Al ser un auto de cuatro puertas con estilo coupé y en configuración liftback, porta todos los genes de la herencia deportiva de Honda. Sin temor a equivocarnos, fue una gran elección para correr este rally por la reacción inmediata del motor turbocargado que se complementa con una transmisión manual de 6 veleidades, así como una gran capacidad de frenado, que para este auto dicho sistema está desarrollado por Brembo.
Al final, logramos conquistar tanto el primer lugar de nuestra categoría, como el primer lugar dentro de los medios de comunicación / generadores de contenido. Sin embargo, dentro de los resultados absolutos nos quedamos con la segunda posición por nuestra primera etapa. Eso sí, buscaremos la revancha para conseguir ese primer lugar el próximo año.
EL BÓLIDO DORADO
Después de tres años de correr el Rally del Golfo del Pacífico en vehículos con transmisión automática, elegir el Acura Integra Type S, fue una de las decisiones más interesantes que pudimos haber tomado.
Entre el motor turbo de más de 300 caballos, la caja manual de seis velocidades, las vías ensanchadas con neumáticos de alto desempeño y los frenos deportivos desarrollados por Brembo, el comportamiento dinámico es perfecto para un evento como éste.
Las aceleraciones en cada de regularidad son absurdamente fáciles y rápidas, la regulación de la velocidad entre acelerador preciso y frenos, es pan comido, e incluso el control de velocidad crucero nos puede llegar a ayudar a pesar de la caja manual, por lo que mantener las velocidades establecidas en la libreta ruta es realmente fácil con el Integra Type S.
Al ser la primera vez que se corre esta ruta, algunas etapas implicaban pasos por curvas en carreteras de montaña bastante al límite, con velocidades marcadas alrededor de 65 km/h, pero con curvas extremadamente cerradas, por lo que fue un reto para la puesta punto de la suspensión y los neumáticos al no aflojar ni un solo kilómetro por hora para mantener el ritmo ideal, siempre con estabilidad, precisión y seguridad.
Qué excelente elección hicimos con el auto, definitivamente uno de los más divertidos y precisos que hemos utilizado en este rally durante los últimos cuatro años.
LLEGA SEAFOAM A MÉXICO
Para poder correr este Rally con mayor tranquilidad y teniendo la certeza de qué nuestro auto estaba en las mejores condiciones mecánicas, utilizamos algunos de los productos de SeaFoam, la marca de productos y tratamientos número 1 en ventas en Estados Unidos y fundada en 1942.
El tratamiento multiusos que usamos en nuestro auto se agrega al tanque de gasolina para mantener limpios los conductos e inyectores, así como la parte interna de los cilindros, además estabiliza el combustible y controla la humedad; o bien en el aceite del motor, para retirar las resinas que pueden obstruir los conductos más delgados para el paso del aceite del motor. Este tratamiento es seguro para utilizarse en motores a gasolina o diesel.
Al igual que nosotros, pronto podrás conocer y utilizar toda la gama de productos de SeaFoam que llega a México en estas fechas. La línea de productos de SeaFoam en México incluye: Tratamiento Multiusos, Aerosol Sea Foam, Alto Kilometraje, Trans Tune, Deep Creep y Limpiador de Inyectores.
Toda la información de los productos, así como dónde conseguirlos, la puedes encontrar en seafoam.mx
