En muchos ámbitos, Bettina Bulgheroni se convirtió en una de esas personas que sólo basta con mencionar su nombre de pila para saber de quién se está hablando. Con los años, se consolidó como una referente del Círculo Rojo, ese punto en el que confluyen los mundos de la economía, las empresas, la dirigencia social y la política. Una influyente. Aunque ella se sienta más a gusto con otra definición, según comenta en su intercambio con APERTURA.
Para usted, ¿qué significa cuando oye hablar de "mujer influyente"?
Entiendo que se refiere a alguien que tiene un impacto significativo en su entorno. Sin embargo, prefiero pensar en términos de compromiso y contribución, más que en influencia. Creo que cada uno de nosotros, independientemente del lugar que ocupemos, tenemos la capacidad de hacer un cambio positivo en nuestras comunidades a través de nuestras acciones y decisiones.
¿Qué representa o siente cuando se la identifica a usted como una "mujer influyente"?
No me siento una mujer influyente en el sentido tradicional del término. Me considero, más bien, una mujer comprometida con mi trabajo y, al mismo tiempo, mi compromiso va más allá de los negocios; se extiende a la educación, brindando apoyo a mujeres, hombres y niños que apuestan por un futuro mejor. Es por eso que me esfuerzo por hacer una diferencia donde puedo.
¿Cuáles fueron los principales desafíos que superó en su trayectoria?
Uno de los principales que superé en mi trayectoria fue presidir la empresa Samconsult, que es un holding de más de 100 empresas. Damos servicios corporativos. Principalmente, estudiamos el desarrollo de nuestras empresas agroindustriales. Lograr expandirnos a lo largo de ocho países también fue un desafío. Manejar una organización con más de 2000 empleados presenta una serie de retos, desde garantizar una comunicación efectiva, hasta mantener una cultura corporativa cohesiva. Sin embargo, a través de un liderazgo fuerte y un equipo dedicado, hemos logrado vencer y prosperar en un mercado global competitivo.
¿Qué desafíos persisten y cuáles son los nuevos que identifica?
Los desafíos en el mundo empresarial son constantes y cambiantes. En la actualidad, uno de los retos más grandes es mantenernos competitivos en un mercado global que evoluciona rápidamente. Esto implica estar al tanto de las últimas tendencias y tecnologías, y adaptar nuestras estrategias de negocio en consecuencia. Además, nos esforzamos por garantizar el bienestar de nuestros empleados en estos tiempos inciertos, lo cual implica encontrar formas innovadoras de apoyar a nuestro equipo mientras seguimos creciendo como empresa.
¿Cuáles fueron sus mayores aprendizajes? ¿Cómo los plasma día a día?
Mis mayores aprendizajes han sido entender que el esfuerzo y compromiso son un buen camino. Que, si algo sale mal, es una oportunidad para mejorar. Y que la paciencia y la perseverancia son claves para alcanzar el éxito. Estos aprendizajes los aplico diariamente en mi vida.
¿Cuáles son sus actuales o próximos objetivos?
Más allá de los tangibles y cuantificables, mi compromiso principales con las personas que conforman los diversos equipos con los que trabajo. Mi objetivo siempre es crear los entornos donde cada individuo se sienta valorado, apoyado y motivado para dar lo mejor de sí mismo. Creo firmemente en el poder de la educación y el desarrollo personal, por lo que me esfuerzo por proporcionar oportunidades de aprendizaje y crecimiento a todos. Al final del día, el éxito en cualquier organización proviene de su gente. Y, cuando cuidamos a nuestras personas, el éxito surge naturalmente.
¿Cuál cree que es el diferenciador del liderazgo femenino?
Creo que el diferenciador del liderazgo, independientemente del género, es la capacidad de inspirar y motivar a otros mientras se toman decisiones difíciles y se mantiene el rumbo de la organización.
¿En qué tipo de circunstancias o situaciones se sintió víctima de prejuicios? ¿En cuáles y cómo los superó? ¿Cuáles ignoró y cuáles terminó convirtiéndolos en fortaleza?
He enfrentado prejuicios en diversas situaciones. Pero siempre he optado por demostrar con resultados la efi cacia de mi liderazgo. Cada experiencia me ha hecho más fuerte y resiliente.
¿Las mujeres hoy tienen presencia o protagonismo en el mundo empresario, político y social de la Argentina?
En la Argentina, las mujeres están ganando cada vez más presencia en el ámbito empresarial, político y social. Esto nos muestra un cambio positivo hacia una mayor diversidad, tanto de perspectivas como de habilidades en todos los sectores. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer.
¿Cómo ve la situación política y económica del país?
La situación política y económica de la Argentina presenta desafíos significativos. Pero, también, oportunidades. Sé del potencial de nuestro país y del esfuerzo y compromiso que, hoy, el Presidente Milei lleva adelante, lo cual me llevó aceptar el rol de Embajadora de Marca País. Estoy convencida de que todos, con decisión y colaboración, podemos superar cualquier obstáculo y construir un futuro mejor. Mi elección, hoy, es contribuir al desarrollo y promoción de la Argentina, destacando nuestras fortalezas y capacidades únicas en el escenario global.
(La versión original de esta nota se publicó en la edición número 371 de APERTURA, correspondiente a noviembre de 2024)