En lo que va del año, el Hospital Nacional de Niños (HNN) ha atendido a 430 menores con una prueba positiva por dengue. De ellos, 46 han requerido hospitalización.
Aunque ninguno de ellos ha fallecido, la infectóloga Marcela Hernández de Mezerville confirmó que seis han presentado dengue grave. Esto es particularmente preocupante, ya que el dengue grave, anteriormente llamado “dengue hemorrágico”, puede ocasionar que el paciente entre en choque y provocar que varios órganos presenten fallas o dejen de funcionar, o que ocurra un colapso respiratorio.
¿Cómo es el perfil de estos niños? La médica dijo a La Nación que el grupo de edad con más casos confirmados de esta enfermedad en el HNN es el de 5 a 9 años, con 206 (47,91%); le sigue el grupo de 10 a 14, con 131 (30,47%). En los grupos más jóvenes el impacto es mucho menor, en los menores de 1 año solo se han dado 17 casos (3,95%), y 76 (17,67%) en quienes tienen entre 1 y 4 años.
Los cantones donde son más comunes las infecciones en los menores coinciden también con los de mayor incidencia de la enfermedad: el primer lugar lo ocupa San José, seguido de Desamparados, Alajuela, y Alajuelita. Los distritos con mayor incidencia son de San José: Pavas, Uruca, San Sebastián y Hatillo.
Hernández aseguró que en las últimas semanas los casos han venido a la baja. Cuando mayor impacto hubo fue en la semana 41 (que transcurrió del 6 al 12 de octubre) y de ahí ha venido en descenso. Para la semana pasada (la número 49) solo se diagnosticaron siete casos.
Jarbas Barbosa, director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), detalló este martes en conferencia de prensa que los niños han sido más afectados por el dengue este año que en años anteriores.
“El dengue también está presentando un riesgo mayor para los niños. Los menores de 15 años han representado más de un tercio (33%) de los casos de dengue en Costa Rica, México y Paraguay", destacó el jerarca.
En años anteriores, los casos de dengue en niños han representado entre uno de cada cuatro (25%) y uno de cada cinco (20%).
Como el Hospital de Niños no recibe a toda la población infantil diagnosticada, La Nación consultó con el Ministerio de Salud -al que como ente rector se le debe notificar cada caso reportado- la cantidad total de menores infectados durante el año. Se está a la espera de la respuesta.
La situación de un impacto en niños no sería única en América. En febrero, un estudio desarrollado en tres hospitales en India y publicado en la revista Nature Medicine, concluyó que las primeras infecciones en niños no necesariamente son más leves y podrían tener la misma gravedad que una segunda infección. Las primeras infecciones constituyeron el 55% de los casos de dengue grave pediátrico y cinco de los siete fallecimientos reportados.
En los niños el dengue no necesariamente se comporta igual que en un adulto. Barbosa indicó que los síntomas pueden ser más variables. Algunos pacientes solo manifiestan un cuadro similar a la gripe (y confundirse con virus respiratorios), mientras que otros pueden presentar sangrados.
El jerarca señaló que algunos bebés pueden presentar únicamente fiebre, pero conforme se acercan a la preadolescencia las manifestaciones se asemejan a la de los adultos: dolor de cabeza, cansancio, dolor retroorbital (detrás de los ojos), dolor muscular o de articulaciones, náuseas o vómitos, y manchas en la piel.
De acuerdo con el Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), es necesario estar atento a otras señales, principalmente de deshidratación. La deshidratación ocurre cuando se pierde demasiado líquido corporal a causa de la fiebre, los vómitos o por no tomar suficiente líquido.
En los bebés y niños la deshidratación leve o moderada se manifiesta con:
Pero hay otros signos de deshidratación severa en los que es mejor visitar un centro de salud. Estos son:
El CDC recordó que, además de seguir las indicaciones médicas, es importante mantener al menor bien hidratado. La fiebre puede bajarse con acetaminofén, nunca con ibuprofeno o aspirina.
También es importante estar alerta a los signos de alarma. Se dan usualmente después de que la fiebre baja y el paciente comienza a sentirse mejor. En caso de que su niño los presente es necesario ir a un centro de salud.
La vacuna es una nueva herramienta con la que se cuenta en la actualidad, pero no todos los países la aplican. En Costa Rica se tomó la decisión de no adquirirla todavía.
Sin embargo, Thais dos Santos, asesora en Vigilancia y Control de Enfermedades Arbovirales de la OPS, recordó que esta vacuna no es para todas las personas.
“Esta vacuna es más efectiva para quienes ya tuvieron una primera infección de dengue. Para la mayoría de las personas la primera infección es asintomática o no es grave, lo que sí preocupa es una segunda infección. La recomendación es visualizar los grupos de hospitalización para ver quiénes lo necesitan más”, detalló.
Por ello es necesario repasar los consejos para impedir la proliferación de criaderos donde la hembra del Aedes aegypti pueda poner sus huevecillos:
Barbosa concluyó: “Más del 80% de los mosquitos están en las residencias. Son solo 15 minutos por semana para eliminar criaderos y minimizar las oportunidades de enfermar”.
