Nuevamente, el eventual trasladado de la Jefatura de la Policía de Vía Layetana «no ha sido objeto de la Junta de Seguridad de Cataluña» pero, preguntando al respecto, el ministro Fernando Grande-Marlaska ha reiterado este jueves que no entra en los planes del Gobierno, pese a la reciente petición de Salvador Illa . « La Policía Nacional lleva años resignificando con su trabajo decidido , en defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos de Cataluña, ese edificio. Ese edificio, que como otros muchos, desgraciadamente, y durante la dictadura, fueron utilizados para violentar los derechos y libertades». Además, ha puntualizado el ministro, no sólo el de Layetana , sino que «fueron muchos edificios, que llevan años también siendo resignificados con el trabajo decidido, en su caso, de las fuerzas y cuerpos de seguridad en defensa de nuestras libertades, o de otros funcionarios públicos, trabajando también en defensa de la Constitución». Así ha zanjado Marlaska la cuestión, después de que Illa asumiese una reivindicación del anterior Govern de ERC, y reclamase convertir el edificio en un espacio de memoria. Cabe recordar que, en 2019, Vía Layetana fue foco de la violencia independentista tras la sentencia del Supremo contra los líderes del 'procés', y donde, durante los disturbios de Urquinaona , varios agentes resultaron heridos de gravedad. Ante las reiteradas peticiones de ERC, Interior siempre ha descartado convertir la Jefatura en espacio de memoria. También ahora, que el reclamo lo asumido el actual Govern, en manos del PSC. De hecho, el Departamento de Justicia habló de cerrar un acuerdo con el Ejecutivo central para «resignificar» el edificio y convertirlo exclusivamente en un memorial sobre la represión durante la dictadura. Este viernes, la respuesta de Marlaska ha sido clara: « La Policía Nacional lleva años resignificando con su trabajo ese edificio ». Precisamente este mañana, una treintena de personas se ha concentrado en la plaza Sant Jaume, coincidiendo con la visita del ministro , para pedir que la Jefatura se convierta en un espacio de memoria. Entre los manifestantes estaba Carles Vallejo, que sufrió torturas durante 20 días en Vía Layetana 43, cuando era la sede de la Brigada Político-Social, tras ser acusado de haber organizado un sindicato en Seat. «Nos torturaban y nos encarcelaban por ejercer derechos que ahora son constitucionales, como el derecho de asociación, reunión, sindicación o huelga, pero que antes eran delitos por los que pagabas con la prisión y la tortura», ha expresado Vallejo a Ep.
