El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, no descartó adelantar las vacaciones y cerrar el año escolar ante el brote de la bacteria mycoplasma, que provocó la muerte de una menor de 13 años en la Región de O’Higgins.
En declaraciones a 24 Horas, el ministro informó que “Tuvimos una conversación informal en medio de los pasillos del Congreso con la ministra de Salud, es algo que tenemos que dilucidar en conjunto y tenemos tiempo. Nosotros formulamos el calendario escolar a mediados del mes de diciembre que está en curso”.
Agregó que “si bien quedan pocos días, aún estamos a tiempo. Nosotros no estamos señalando ni que sí, ni que no, lo que tenemos que hacer es revisar“.
Añadió que “tenemos que tener a la vista la capacidad de flexibilidad para poder adecuar estas cosas que históricamente han sido trabajadas de manera muy estandarizada. El calendario escolar siempre ha sido más o menos igual y cuesta adaptarse a estos ajustes como adelantar las vacaciones”.
“Lo relevante es que estamos cuidando la salud de nuestros niños y niñas, en un momento en que las enfermedades están cambiando, la forma en la que nos afectan, la gravedad con la que impactan y los momentos en que ocurren”, recalcó.
“El sistema educativo, que es donde concentramos a nuestros niños en una gran cantidad de tiempo, tiene que también ser adaptado a esa realidad, esperamos contar con la información y ponernos de acuerdo con el ministerio de Salud de cara a la formulación de nuestro calendario escolar”, concluyó.
El contagio de la bacteria se produce a través del contacto con partículas de secreción de nariz y garganta, emitidas al toser o estornudar, es decir, requiere la proximidad de personas para poder transmitirse. Sin embargo, aunque no todos los que están en contacto con un infectado se enferman, quienes pasan mucho tiempo en su cercanía tienen mayor riesgo.
El Ministerio de Salud ha enfatizado que el Mycoplasma pneumoniae es una bacteria que causa un amplio espectro de infecciones respiratorias, siendo las más frecuentes la bronquitis y bronquiolitis. Además, produce cerca del 20% de las neumonías adquiridas en la comunidad.
Los síntomas a los que hay que poner atención son:
Dolor de garganta.
Fatiga y malestar general.
Fiebre leve o moderada (generalmente no muy alta).
Dolor de cabeza.
Tos seca (inicialmente leve).
Congestión nasal.
Dolor muscular y articular.
Pérdida del apetito.
En algunos casos, pueden aparecer erupciones cutáneas.
Ganglios linfáticos inflamados.
