Una vez pasada la carrera, en Aston Martin ven el vaso medio lleno con los puntos del séptimo puesto. Pero durante el desarrollo de la prueba se vivieron momentos tensos en el box de la escudería, sobre todo cuando su único coche en pista, el de Fernando Alonso, se quedaba fuera de la zona de puntos de forma momentánea.
El motivo lo reflejó bien el propio piloto asturiano a través de la emisora del equipo. Con la carrera neutralizada por el safety car, el momento de relanzar fue especialmente dramático para Alonso, que perdió dos posiciones con insultante facilidad frente a Tsunoda y Hamilton: "No me lo puedo creer. Dos años con el mismo puto problema en las rectas", transmitió.
Y es que el coche no reacciona bien a la hora del relanzamiento, y las resalidas son especialmente lentas, sobre todo en recta. "Tenemos que seguir mirando, que en las primeras vueltas o en las resalidas hemos tenido algún problema de velocidad punta durante todo este tiempo y no conseguimos dar con ello, y la verdad es que perdimos dos o tres posiciones en esa primera resalida que son muy costosas, porque luego es muy difícil adelantar aquí, y si te quedas en esa posición te quedas ya en ella", explicó después a los micrófonos de DAZN y Fox, aunque se mostró "contento por el equipo" al ganar varios puestos en el tramo final.
Un problema que no es de potencia ni de aerodinámica, según el bicampeón mundial. "Tenemos algo de disparidad en lo que el coche piensa que está haciendo en ese momento, y cuando le damos a la resalida, el coche a veces piensa que todavía está detrás del 'Safety Car', no te da toda la energía", detallaba. Algo que ya daban por "resuelto", pero en Catar volvió a ocurrir.