El presidente electo Donald Trump ha designado al doctor Jay Bhattacharya, conocido por sus posturas antivacunas y su oposición a los confinamientos, como nuevo director de los Institutos Nacionales de Salud (NIH). Esta decisión ha generado controversia en el ámbito de la salud pública. Además, podría generar diversas controversias en el ámbito sanitario debido a sus comentarios durante la COVID-19.
Bhattacharya, profesor de Medicina en la Universidad de Stanford, se hizo famoso durante la pandemia por el coronavirus por cuestionar las medidas de confinamiento y abogar por la inmunidad de rebaño. Su nombramiento se produce en un contexto donde la política de salud pública sigue siendo un tema candente en Estados Unidos.
La elección de Bhattacharya, quien trabajará junto a Robert F. Kennedy Jr., también conocido por sus posturas antivacunas, marca un cambio significativo en la dirección de la investigación médica en el país. Trump ha expresado su confianza en que ambos restaurarán los NIH a un "Estándar de Oro de Investigación Médica".
La nominación de Jay Bhattacharya ha suscitado reacciones mixtas. En un comunicado, Trump afirmó que Bhattacharya y Kennedy Jr. "examinarán las causas subyacentes y las soluciones a los mayores desafíos de salud de Estados Unidos". Sin embargo, muchos expertos en salud pública han criticado las posturas de Bhattacharya, considerándolas peligrosas.
Bhattacharya fue uno de los autores de la Declaración de Great Barrington, un documento que advertía sobre los efectos negativos de los confinamientos y promovía la idea de que las personas de bajo riesgo deberían vivir normalmente. Esta declaración fue recibida con escepticismo por parte de la comunidad científica, que la consideró irresponsable.
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La elección de Bhattacharya es un recordatorio del impacto que la pandemia de Covid-19 ha tenido en la política de salud pública en Estados Unidos. En marzo de 2021, Bhattacharya afirmó que "los confinamientos fueron el mayor error de salud pública". Su visión contrasta con la de muchos expertos que abogan por medidas más estrictas para controlar la propagación del virus.
La nominación de Bhattacharya debe ser aprobada por el Senado, lo que podría generar un debate intenso sobre su idoneidad para el cargo. Además, Trump ha nombrado a Jim O’Neill como subsecretario de Salud, quien es el único de los elegidos con experiencia en la burocracia de salud pública.
Los NIH son la principal agencia de investigación médica de Estados Unidos, con un presupuesto de 48.000 millones de dólares. Esta agencia financia investigaciones sobre vacunas, cáncer y otras enfermedades, y realiza su propia investigación en laboratorios en Bethesda, Maryland. Entre sus logros se encuentran avances significativos en el desarrollo de medicamentos y vacunas.
La dirección de Bhattacharya podría influir en la forma en que se llevan a cabo las investigaciones y se distribuyen los fondos, especialmente en un momento en que la confianza en las instituciones de salud pública es crucial. La comunidad científica estará atenta a cómo se desarrollan los acontecimientos en los NIH bajo su liderazgo.
