El estado de California emitió una orden que encendió las alarmas en la industria alimentaria. Los reguladores exigieron a un importante productor de lácteos detener la comercialización de sus productos, generando incertidumbre en consumidores y distribuidores. Esta medida se implementó tras detectarse una amenaza que compromete la salud pública.
Las autoridades informaron que la distribución de leche cruda quedó suspendida luego de identificar muestras contaminadas con el virus H5N1 en una de las granjas más grandes del estado. Los productos, que habían llegado a diferentes puntos de venta, fueron retirados de manera preventiva.
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El Departamento de Salud Pública de California (CDPH) pidió al público abstenerse de consumir ciertos lotes y desecharlos inmediatamente. A pesar de la preocupación generada, no se reportaron enfermedades asociadas con estos lácteos. La empresa productora aseguró que intensificó los análisis internos en respuesta a lo ocurrido.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) confirmó que un niño en California se contagió con el virus H5N1, siendo el primer caso registrado en un menor en todo el país. Aunque el paciente evolucionó favorablemente, las autoridades continúan investigando el origen del contagio.
Los miembros de la familia del menor presentaron síntomas, pero tras las pruebas realizadas, se descartó la presencia del virus en ellos. Hasta el momento, los investigadores no hallaron indicios de transmisión directa entre personas.
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En el estado, 29 personas dieron positivo para gripe aviar, siendo casi todos empleados que tuvieron contacto con animales infectados. Este brote destacó la necesidad de reforzar los protocolos de seguridad en el manejo de ganado y alimentos.
La situación planteó interrogantes sobre el impacto que podría tener esta suspensión en los precios de productos lácteos y el abastecimiento en los próximos meses. Aunque la producción de leche cruda es un sector reducido, los consumidores ya manifestaron su preocupación.
