Racing y Club Deportivo Mirandés, primer y tercer clasificado de LaLiga Hypermotion, se miden en los Campos de Sport (sábado 30- 18:30 horas) dispuestos a continuar con los sobresalientes registros conseguidos tras la celebración de algo más del primer tercio del campeonato 2024/25. 37 y 28 puntos, respectivamente, en 16 jornadas. Cántabros y burgaleses, por lo tanto, disputan un destacado duelo de altura tanto en la tabla como en el ambiente, pues El Sardinero presentará otro lleno hasta los topes con 600 ‘jabatos’ en la zona sur. La escuadra verdiblanca, que acumula nueve jornadas consecutivas sin perder en la categoría de plata, quiere mantener su solidez delante de su parroquia, donde solo ha sufrido una derrota. Sobresaliente.
José Alberto, que vivirá un partido especial al haber dirigido al Club Deportivo Mirandés campañas atrás (Vicente. Marco Sangalli y Lago Junior también actuaron como locales en Anduva), no podrá contar para la cita ante los rojillos con los lesionados Pol Moreno e Íñigo, pero recupera a Juan Carlos Arana. El delantero canario se ha ejercitado con normalidad esta semana tras superar el esguince que se produjo en la rodilla derecha al comienzo de noviembre y estará a disposición del técnico, que el pasado fin de semana ya incluyó a Mantilla en la expedición para el encuentro de La Rosaleda. La enfermería racinguista pierde inquilinos y, además, Manu Hernando regresa tras haber cumplido sanción por su expulsión frente al Burgos CF. Cuantos más efectivos, mejor.
Si la temporada 2024/25 del Racing abre telediarios, el papel del Club Deportivo Mirandés no se queda muy atrás. Y es que el conjunto burgalés, con una plantilla completamente renovada, solo ha perdido cuatro partidos de la presente edición de LaLiga Hypermotion y con 12 dianas encajadas es, junto a los verdiblancos, el conjunto menos goleado de la categoría. Dirigido por el joven Alessio Lisci (llegó a la elite en las filas del Levante UD), en su plantilla figura el exracinguista Juan Gutiérrez -se formó en La Albericia y estrenó con el primer equipo verdiblanco a los 17 años- que comparte vestuario con futbolistas que atraviesan un gran momento de forma como Panichelli, Izeta, Tomeo o Gorrotxategi.
