Descontar de las propinas de los camareros los desperfectos o averías en un bar suele suscitar duros reproches en redes sociales. Una cadena de restaurantes ha llevado esta práctica hasta extremos desconocidos, como sufragar así cada nuevo táper roto a razón de 15 euros o incluso repercutir a sus empleados el coste de reparar dos enchufes eléctricos. El influencer valenciano Jesús Soriano espera confirmación de los afectados de uno de los establecimientos de esta red para presentar «una denuncia colectiva », después de conocer su caso a través de uno de ellos que le envió capturas de pantalla de los mensajes que lo prueban. Mientras tanto, ya lo ha difundido en su cuenta de X ( @soycamarero ). «Ya están arreglados los dos enchufes, como os dije, estos arreglos son por culpa de un mal uso, así que la cocina se hará cargo del costo de su reparación, la próxima vez, que espero que no vuelva a ocurrir, se hará responsable de pagarlo a la persona que haya sido, vamos a mantener las cosas, por favor, que cuesta su dinero», comunica la Dirección Ejecutiva a su plantilla. En cuanto a los recipientes de plástico, advierte en otro aviso que «cada táper que se rompa en cada establecimiento se descontará del bote, hay que tener cuidado con el material, que vale mucho dinero, en Bermejales ya me ha traído otro partido, se descontará del bote automáticamente, gracias; cada uno vale 15 euros ». Y para dar una idea de la trascendencia que dan en esta empresa a las « reuniones urgentes», advierten a «todo el personal de cocina y de sala» de que «quien no acuda, si no es por fuerza mayor, se cesará de empleo y sueldo», aunque luego matiza que sólo se « despedirá » al ausente de la sección de cocina. Como en otras ocasiones al revelar estas situaciones al menos de dudosa legalidad, en el hilo se cuestiona la utilidad de divulgarlo sin más: «¿Pero este tipo de 'denuncias públicas', sin saber de qué establecimiento se trata, para qué sirven?» A lo que Soriano responde que hay más acciones detrás. «Qué se publique aquí sólo esto no significa que no se haga nada de forma interna, les he enviado el enlace de Inspección de Trabajo que los mismos de Inspección de Trabajo me enviaron a raíz de otro caso en el que ellos mismos me contactaron», explica el influencer «Y también he convencido al compañero para que hable con todo el equipo para que se pongan en contacto conmigo y hacer una denuncia colectiva. Aquí publico lo que ocurre y muchos niegan», apostilla. De hecho, previamente presenta este caso revelando que el trabajador que se lo contó «firmó un contrato de confidencialidad » y no quiere que dé más detalles por « miedo ». Para colmo, Soriano indica que vio a uno de los socios de esta cadena «en un podcast diciendo que en este sector habría que mejorar las condiciones, ya que no son buenas». Para concluir que «como si ellos lo hicieran…» Entre las reacciones en X, hay quien cuestiona también ese precio de los envases de plástico: «¿Los compra de plata de ley o de sangre de unicornio? 15 euros unos 'tuppers', anda ya, tío rata». Además, subraya que «¡los botes de propinas son del personal y los jefes jamás deben meter mano!»
