Pedro Sánchez llega al 41º Congreso Federal del PSOE on el partido sumido en una crisis interna tras la dimisión, forzada desde dentro, de su líder en Madrid, Juan Lobato. La gran cita socialista, de la que el presidente saldrá reelegido secretario general, en una suerte de 'indulto' político, prevé acallar las voces críticas con una renovación de su Ejecutiva y el lanzamiento de Óscar López como alternativa a Lobato. La sombra de la corrupción, más difícil de aplacar, agita un congreso al que Sánchez llega con al menos 15 personas de su entorno bajo sospecha. Las acusaciones del comisionista de la trama Koldo , Víctor de Aldama, salpican a varios cargos del partido; entre ellos, su secretario de Organización,...
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