El puerto de Alicante ha conseguido darle la vuelta a la dinámica negativa en la que se hallaba inmerso el tráfico de mercancías desde el inicio del año. Y es que la buena evolución que ha experimentado de forma progresiva tanto el movimiento de contenedores como el de los graneles le ha permitido situarse en positivo por primera vez desde el inicio del año, al haber alcanzado los 2,6 millones de toneladas de productos de diversa índole. La frenética actividad de la nueva terminal de JSV, naviera que registra números récord, está teniendo una influencia decisiva en esta mejora de resultados del recinto portuario.