El nuevo informe de la Oficina de Propiedad Intelectual Europea coloca al país muy lejos de la cabeza en el consumo de contenidos pirata y señala que este está directamente relacionado con la desigualdad y la falta de alternativas económicas
LaLiga pide imputar a los jefes de Google, Apple y Huawei en España por no actuar contra una app IPTV acusada de piratería
No, España no es uno de los países con mayor índice de piratería, como algunos responsables del sector de los contenidos audiovisuales traslada habitualmente. Es, de hecho, el quinto estado con menor índice de piratería por usuario de toda la UE, tal y como refleja el informe de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) sobre 2023, que se publica este jueves y al que ha tenido acceso elDiario.es.
Con 8,5 accesos mensuales a contenidos pirateados, los españoles se colocaron casi dos puntos por debajo de la media europea, que es de 10,3, y apenas poco más de un punto por encima del país que registra el mínimo en este sentido, que es Italia con 7,3 accesos mensuales por usuario. En el extremo contrario se sitúan los países bálticos y del norte de Europa, con Letonia, Estonia y Lituania (26,2, 23,2 y 21,7, respectivamente).
El análisis de este año es además el primero que contabiliza el impacto de los servicios IPTV (Televisión por Protocolo de Internet, por sus siglas en inglés), una tecnología que permite la transmisión de contenidos televisivos online y que en algunos casos se está usando para acceder a retransmisiones de pago, como el fútbol y otros deportes. Sin embargo, la EUIPO señala la dificultad de cuantificar esta categoría, que se da a través de redes y dispositivos privados, por lo que las cifras de impacto se basan en las visitas a sitios web de registro de IPTV pirata, no en el consumo real.
Como en el resto de los países europeos, los contenidos televisivos son los que más se piratean en España (48% del total). Sin embargo, aquí España también se sitúa en la tendencia contraria, siendo uno de los 9 miembros de los 27 donde este tipo delictivo disminuyó respecto al año anterior. España también se encuentra entre los países con menor número de accesos mensuales por usuario de internet para películas, aunque en el caso de la música, el consumo pirateado creció.
Los datos contratas tan con las declaraciones del presidente de la patronal del fútbol, Javier Tebas, que afirmó recientemente que “el 40% de la población española piratea”, pidiendo legislaciones más duras y la posibilidad de poder exigir a las operadoras que le den acceso a los datos de los usuarios que se conectan a servicios IPTV, a pesar de que estos también tienen usos que entran dentro de la legalidad.
“Si no resolvemos este problema,nos vamos a una situación muy complicada. El día que tengamos la legislación ya va a estar obsoleta, porque el pirata va por delante”, continuaba Tebas, adelantando que LaLiga presentará “querellas criminales” contra “Google, en Ecuador, en Brasil y en Francia también” por negarse a retirar apps IPTV de la tienda de Android. En España, la patronal de clubes de fútbol ha pedido la imputación de los máximos responsables de Google, Apple y Huawei en un caso contra una de estas apps, como adelantó en exclusiva elDiario.es.
“Según el estudio, España no sale mal parada en cuanto a piratería en 2023 (tendencia que ya observamos en 2022)”, reseña Nathan Wajsman, economista jefe de la EUIPO, en declaraciones a este medio. Pese a todo, Wajsman afirma que “sigue siendo un índice muy alto, que demuestra que debemos seguir concienciando a la ciudadanía sobre los riesgos de acceder a contenidos pirateados”.
El informe de la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE destaca que el pirateo de televisión por IPTV es un problema creciente el ámbito europeo. Un análisis previo de este organismo ya cifraba en 1.060 millones de euros los ingresos de este tipo de negocio, y considera que ha aumentado un 10% a fecha de hoy.
La EUIPO resalta que los niveles de piratería a nivel europeo se mantienen altos y cómo estos están relacionados con la población y desempleo juvenil y la desigualdad de ingresos. “Este estudio arroja luz sobre el consumo de contenidos digitales y los factores que impulsan la piratería. Es imperativo abordar las causas de este comportamiento, que a menudo provienen de la falta de acceso a contenidos legales asequibles y de la necesidad de una mayor concienciación pública sobre las consecuencias de la piratería”, explica su director, João Negrão.
El informe concluye que “el volumen de la oferta legal contribuye a reducir la piratería en casi todos los ámbitos”. A su vez, recalca que un mayor número de plataformas legales y canales de televisión está asociado con una menor piratería. “Nuestro análisis apunta a factores económicos y demográficos que pueden influir en los niveles de piratería, por ejemplo la proporción de jóvenes en la población o el grado de desigualdad económica en la sociedad, pero también hay otros factores muy importantes como la percepción y actitud hacia la piratería, la disponibilidad de una oferta de contenidos legales y el conocimiento sobre esta oferta legal”, señala Wajsman.
Tomando en cuenta el factor edad, el estudio muestra que la población joven tiende a presentar mayores consumos de contenidos pirateados, especialmente en el caso de las películas. Otra variable directamente proporcional a este ilícito es la desigualdad: a mayor desigualdad presente en un país, mayor piratería tiende a presentar.
No obstante, en ocasiones los resultados muestran la complejidad creciente de este fenómeno. El análisis econométrico de la EUIPO muestra que un mayor PIB per cápita está asociado con una menor piratería de películas, pero con una mayor piratería de eventos deportivos en directo. Esto sugiere que el nivel de ingresos puede tener un efecto complejo en la piratería, dependiendo del tipo de contenido.