La nueva Ley de Formación Profesional, que entró en vigor en el curso 2024-2025, pasa desapercibida para la mayoría de las empresas en España. Según el Estudio de Clima Empresarial realizado por la Cámara de Comercio de España en colaboración con Sigmados, el 82,1 % de las empresas no está al tanto de esta normativa, un desconocimiento que afecta a organizaciones de todos los tamaños y sectores. El impacto es especialmente alto en comercio (86,1 %), industria (85,8 %) y turismo, hostelería y restauración (85 %).
Entre las empresas que sí conocen la nueva ley, más de la mitad (53,4 %) muestra interés en acoger alumnos en prácticas. Este porcentaje aumenta de forma significativa en las grandes empresas (84,1 %) y en sectores como la construcción (69,9 %), donde la demanda de perfiles especializados es más acuciante.
El 62,3 % de las empresas encuestadas reconoce las ventajas de la formación dual. Por sector de actividad, el porcentaje más elevado se da entre las empresas del sector agroalimentario (68,0%). Entre los beneficios más destacados figuran:
A pesar de estas ventajas, el 75,1 % de las empresas señala barreras importantes para participar en la modalidad intensiva de formación dual. Entre las principales dificultades se encuentran:
Por sectores, la construcción es el que encuentra más problemas para sumarse a esta modalidad formativa, con un 81,9 % de empresas que identifica obstáculos significativos.
José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, ha destacado la importancia de la formación dual como una herramienta clave para el desarrollo empresarial y la competitividad: "La formación dual representa una oportunidad estratégica para las empresas españolas, al ofrecer una mayor adaptación a las necesidades del mercado y potenciar el desarrollo del talento. Por ello, a partir de enero de 2025, intensificaremos nuestra colaboración con el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes. Nuestro objetivo es que las empresas, especialmente las pymes, puedan aprovechar plenamente las ventajas que esta modalidad formativa brinda en términos de competitividad y mejora de la productividad".
Esta apuesta subraya la necesidad de alinear los esfuerzos del sector público y privado para maximizar el impacto de esta modalidad educativa en el tejido empresarial del país.