Iván Campo estaba lesionado y Karanka tenía molestias, así que Del Bosque tiró de Paco Pavón, como Nacho, el central de referencia cuando se habla de canteranos en la primera plantilla del Real Madrid. «Ser canterano es muy difícil», reconoce cuando se le pregunta por Raúl Asencio. Militao se ha lesionado y Alaba no se ha recuperado. Como si fuera Pavón, a Asencio se le ha abierto una puerta que parecía muy cerrada. «Por las necesidades del primer equipo se le ha abierto una oportunidad», asegura Pavón. «Como defensa es verdad que es más fácil entrar en el primer equipo porque los futbolistas de arriba son muchos y muy buenos, pero después en lo que se refiere al juego, es muy complicado ser central en el primer equipo del Real Madrid, porque no estás protegido».
Antes del partido contra el Leganés se vio cómo Rüdiger hablaba con Raúl Asencio y le hacía varias indicaciones. Era su primer partido como titular en el Real Madrid. Había jugado contra Osasuna, por una situación de emergencia y Ancelotti siguió apostando por él para el choque del pasado domingo. Fue, como le pasó a Pavón, como pasa a casi todos los jugadores que llegan desde abajo, una necesidad, pero también fue una prueba. Si la pasaba, y lo hizo, le tocaba el examen final, la Ebau para cualquier futbolista: hoy, en Anfield, el Liverpool.
«En el Real Madrid», recuerda Pavón, «pasas de jugar lo que antes era Segunda B a ser titular en los grandes campos de Europa. Yo debuté contra el Athletic, después jugué en Vitoria y después en Champions». Asencio se mide hoy al líder la Premier, con ocho puntos de ventaja sobre el Manchester City y que también manda en la clasificación de la Champions. Por lo menos, produce respeto.
El entrenador Arne Slot ha recogido lo mejor de Klopp y ha construido un equipo que mezcla la pausa con el vértigo y que sabe cómo hacer daño a los rivales. Arriba, Salah, pese a que ha aprovechado su buen momento para dar pistas de su salida, es fijo e imprescindible. Junto a él, Gapko y Luis Díaz. No es el equipo que más remata ni que más goles hace de Europa, pero sin duda es quien mejor aprovecha sus ocasiones.
Y contra ellos, Mendy, Valverde en una posición que no es la suya, Rüdiger y el futbolista de la cantera que ha impresionado en el primer equipo. Asencio llevaba años destacando en las categorías inferiores y tanto él como el club decidieron seguir juntos pese a que los últimos años ha tenido ofertas para marcharse. «Ha jugado serio y con madurez», explicó Ancelotti después del partido del pasado domingo. Y es que esas son dos de las virtudes principales del futbolista: no tiene miedo y no le asustan los retos. Pese a no ser alto, va bien por alto y no pierde la posición. Además, en el vestuario del filial Raúl Asencio es el líder indiscutible.
«Me ha sorprendido para bien», cuenta Paco Pavón, «le había visto en el filial y ahí tenía mucha jerarquía y se veía que era muy rápido, pero es que, además, en el primer equipo, se está desenvolviendo bien desde atrás, en el inicio del juego. Desde que está él, la salida del balón desde atrás es más limpia y eso ayuda a la gente de creación de arriba» . Se vio en el primer partido que disputó, contra Osasuna. Vio como nadie un desmarque de Bellingham y le puso un balón a la espalda. Según contaba Relevo, esos balones largos los ha estado ensayando una y mil veces con Raúl, en el Castilla. El mítico capitán blanco le pide que busque así salir en diagonal hacia los laterales. Está claro que ha aprendido la lección.
Asencio siempre ha tenido muy claro lo que quería y su objetivo era llegar al primer equipo. Deportivamente, estuvo cerca de no llegar porque se marchó con sus padres de Madrid, pero le pidieron volver. Y desde entonces, ha seguido una línea recta.
Aunque su nombre ha salido por problemas judiciales, ahora es cuando es conocido de verdad «Pasas de ver al Madrid por la tele, a que te reconozcan por la calle, de repente dejas de ser anónimo», dice Pavón. Raúl Asencio no parece afectado por eso. Centrado en el fútbol, sabe que ha pasado el primer nivel, el salto casi imposible de llegar al primer equipo. Queda el segundo: los partidos de altísima competición. «Que siga a este nivel», es el único consejo de Paco Pavón.