En la madrugada del martes, vecinos del distrito de Comas se vieron conmocionados al descubrir el cadáver de una mujer mayor en el primer piso de una vivienda que alquilaba. La víctima, identificada como Noemí Muñoz, fue hallada por su hijo con signos de violencia, lo que ha generado sospechas de un posible asesinato.
Muñoz vivía en la planta baja del inmueble, mientras que en el segundo piso residía una pareja que había llegado hace aproximadamente un mes. Según declaraciones de los familiares de la fallecida, los inquilinos mantenían constantes discusiones, lo que había generado preocupación en el entorno cercano.
El hijo de la víctima, quien fue la última persona en hablar con ella el pasado viernes, comentó que durante la plática su madre mencionó haber escuchado una disputa entre los inquilinos. Tras no recibir respuesta en los días posteriores, los familiares acudieron al domicilio el lunes, donde encontraron el cuerpo sin vida y con signos de haber sido violentada.
PUEDES VER: Joven cajamarquina desaparece en Comas y aseguran que fue vista cerca a condominio Las Praderas
Por su parte, residentes del lugar afirman que la pareja fue vista por última vez el mismo sábado, cuando abandonaron la vivienda en un vehículo con lunas polarizadas. Este detalle, sumado a la ausencia del teléfono móvil y las tarjetas de crédito de la víctima, refuerza la hipótesis de un asesinato.
Las primeras investigaciones sugieren que Muñoz pudo haber intentado intervenir en una de las discusiones de la pareja, lo que habría desencadenado un trágico desenlace.
La Policía Nacional ha iniciado las diligencias correspondientes para esclarecer el caso y localizar a los inquilinos, quienes permanecen como principales sospechosos. Mientras tanto, la cuñada de la fallecida pide justicia.
PUEDES VER: Caso Sheyla Cóndor: así fueron las últimas horas de vida del feminicida Darwin Condori
El caso de Noemí Muñoz no sería el único del distrito, pues los restos de Rosa María Liberto Salcedo, madre soltera reportada como desaparecida en 2011, fueron encontrados en un pozo de una panadería en Comas. Su familia exige justicia y la captura de su expareja, principal sospechoso del caso.
Elizabeth Vásquez, hija de Rosa, recuerda cómo, a sus 16 años, junto a su familia, intentaron localizarla sin éxito. Las sospechas recayeron sobre su expareja, Yovani Juárez Ventura, con quien Rosa había tenido una relación complicada. A pesar de los años transcurridos, la familia nunca perdió la esperanza de hallar a Rosa con vida.