Para las personas preocupadas por la salud de su corazón, controlar los niveles de colesterol en sangre es una de las principales medidas que deben tomar. Los medicamentos para el colesterol, también conocidos como estatinas, son la principal forma de prevenir más problemas, junto con los cambios de acuerdo a un estilo de vida saludable.
Ambas decisiones son necesarias para alguien con el colesterol alto porque este aumenta el riesgo de desarrollar aterosclerosis, una enfermedad conocida a veces como "endurecimiento de las arterias", que se presenta cuando se acumulan grasa, colesterol y otras sustancias en las paredes de las arterias aumentando con ello el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
Según el Dr. A Ravikanth, cardiólogo jefe de los hospitales Kamineni de la India; las estatinas actúan inhibiendo una enzima implicada en la producción de colesterol en el hígado y actúan para reducir los niveles de lipoproteínas de baja densidad (LDL), a menudo denominado colesterol "malo". No obstante, a pesar de que estos medicamentos son efectivos para controlar el colesterol, existen algunos cuestiones nutricionales que afectan a las personas que toman estos medicamentos.
Una revisión de 2015 publicada en el American Journal of Medicine encontró que el zumo de pomelo podría llegar a aumentar los niveles sanguíneos de ciertas estatinas, como la simvastatina y lovastatina, en un 260%; y la atorvastatina, en un 80%.
Esta fruta tenía un beneficio significativo en la prevención de ataques cardíacos. Sin embargo, según ha indicado el Dr. A Ravikanth, la notable interacción que el pomelo produce con las estatinas provocando un aumento de su concentración en la sangre puede llegar a desencadenar potenciales efectos secundarios de los medicamentos, como dolor muscular o daño hepático. El experto advertía de las posibles consecuencias que puede tener el pomelo en pacientes que tomen estas estaminas.
Beber alcohol con estatinas puede ser una combinación dañina por el riesgo que pueden suponer para el hígado. Para el Dr. A Ravikanth, el alcohol puede aumentar el riesgo de daño hepático, una de las mayores preocupaciones a tener en cuenta en una persona que toma estatinas, ya que los medicamentos se metabolizan en el hígado.
La Organización Nacional de Salud del Reino Unido, país especialmente afectado por la ingesta de alcohol de sus habitantes, asegura que las personas que beben regularmente grandes cantidades de alcohol tienen un mayor riesgo de sufrir los efectos secundarios más graves por el uso de estatinas. Además, el alcohol puede afectar la eficacia de los fármacos alterando la capacidad de las estatinas para reducir los niveles de colesterol.
Aunque las estatinas pueden ser una forma eficaz de controlar los niveles de colesterol durante la ingesta de alimentos, eso no implica que se pueda comer lo que uno quiera. A pesar de que los alimentos procesados o ricos en grasas no interactúan directamente con las estatinas, estos pueden interferir en los beneficios del medicamento. De esta manera, es recomendable limitar los alimentos con alto contenido de grasas trans y saturadas, como las carnes rojas, procesadas, los alimentos fritos o los lácteos enteros.
Aquí hay algunas recomendaciones que debe tener en cuenta una persona que está tomando estatinas para controlar el colesterol:
En conclusión, las estatinas desempeñan un papel importante en el control de los niveles de colesterol y la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, es importante considerar posibles interacciones con los alimentos, ya que existen ciertas elecciones dietéticas que pueden afectar la eficacia de los medicamentos.
Por otro lado, es importante no depender únicamente de sus medicamentos y elegir un estilo de vida saludable adecuado para obtener resultados más rápidos y efectivos. Siempre es importante consultar a su médico ante cualquier duda sobre las estatinas o cualquier tipo de fármaco para reducir el colesterol.
