¿Qué pasaría si un día te levantas y no hubiera Internet? Lo primero es que, esta noticia no la estarías leyendo, pero lo cierto es que el acceso a redes sociales sería el menor de los problemas. Tendríamos que entretenernos con otra cosa. Las implicaciones serían más graves a nivel de sociedad, ya que numerosas empresas y organismos están conectados a la red, y quedarse sin esa conexión desataría una crisis sin precedentes. Por ejemplo, según las estimaciones, un día sin Internet en Estados Unidos provocaría pérdidas de más de 7 mil millones de dólares. Si eso sucede en la potencia económica mundial, imaginad el efecto dominó para el resto de países.
Nosotros mismos como usuarios no podríamos acceder a muchos servicios que utilizamos en nuestro día a día, así que a pesar de todo lo malo que podamos achacarle a Internet, lo cierto es que es algo tan imprescindible que casi podríamos comparar el quedarnos sin Internet 24 horas con cualquier desastre natural.
Por supuesto, también existe quien defiende que algunas cosas mejorarían. Por ejemplo, que disfrutaríamos de más momentos en persona con nuestros amigos y familiares o que pasaríamos más tiempo en el medio ambiente o disfrutando de la naturaleza. Eso sí, si quisieras viajar, acude a una agencia de viajes porque no podrías sacar un billete de avión de forma online.
La psicóloga Yekaterina Murashova llevó a cabo un experimento que muestra lo que ocurre cuando a un grupo de adolescentes se les priva de acceso a Internet y tecnología moderna durante un día. Participaron voluntariamente 68 chicos en edades entre 12 y 18 años. Pasaron ocho horas solos sin acceso a ningún medio de comunicación: teléfono móvil, radio, tele, ordenadores. Lo único que estaba permitido eran las actividades “normales”, como escribir, leer, tocar un instrumento musical, pintar, tejer, cantar, andar.
Ni siquiera la reconocida psicóloga familiar esperaba un resultado tan impresionante. Solo 3 de los 68 participantes pudieron terminar el experimento, una chica y dos chicos. Tres de los participantes incluso tuvieron pensamientos suicidas, cinco de ellos sufrieron intensos ataques de pánico y 27 experimentaron diversos síntomas como náuseas, sudor, mareo, bochornos y dolor abdominal.
Actualmente, no hay riesgo de un apagón generalizado a nivel global. Esto se debe a que, por ejemplo, en Europa, la estructura energética que abastece y provee de electricidad en el continente está segmentada en varias zonas independientes. Esto permite que en caso de que alguna zona sufriera un colapso o tuviera un problema por el cual no se pudiera mantener el suministro, el problema solo afectara a la zona en la que se hubiera dado. De esta forma, el resto de zonas no se verían afectadas por el problema y podrían abastecer o ayudar energéticamente a la zona que resultara afectada.
Son muchos los que abogan por tener preparado un kit de supervivencia y contar con algunos accesorios por si se diese un apagón. Entre ellos, se encuentran:
La mayoría de los apagones se pueden restaurar en cuestión de horas, pero los causados por tormentas o fuertes vientos que dañan las líneas eléctricas y los equipos pueden durar días o incluso semanas.