Esta ingeniería es una disciplina que combina conocimientos avanzados en matemáticas, física y diseño tecnológico para crear embarcaciones funcionales y seguras. En Perú, esta carrera es única, ya que solo se imparte en dos instituciones públicas: la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) y la Universidad Nacional del Callao (UNAC). Ambas universidades forman a profesionales que destacan en sectores clave, tanto a nivel nacional como internacional.
El panorama laboral para esta carrera de ingeniería es muy prometedor. La demanda de expertos abarca astilleros, talleres especializados, instituciones públicas y empresas pesqueras. Además, proyectos como el megapuerto de Chancay generan nuevas oportunidades para estos profesionales, esenciales en el mantenimiento y operación de embarcaciones. Estos ingenieros desempeñan un rol clave en sectores estratégicos de la economía peruana, impulsando el desarrollo marítimo y fluvial.
La Ingeniería Naval, una especialidad poco común en el país, solo se enseña en la UNI y la UNAC. Estas instituciones ofrecen programas orientados al diseño, construcción y mantenimiento de embarcaciones y estructuras marítimas. La UNI, a través de su Facultad de Ingeniería Mecánica, enfoca su currícula en aspectos como hidrodinámica, resistencia de materiales y diseño óptimo. Por su parte, la UNAC incluye un enfoque en el sector portuario y la industria marítima. Esta exclusividad convierte a la Ingeniería Naval en una opción valiosa para quienes desean una carrera con alta especialización y escasa competencia en el mercado laboral.
El rol de un ingeniero naval trasciende la construcción de embarcaciones. Estos profesionales diseñan, supervisan y aseguran el mantenimiento de barcos, garantizando su eficiencia y seguridad. Según Víctor Acosta, director de Ingeniería Naval de la UNI, la formación incluye teoría y dinámica del buque, hidrodinámica naval, estructura de embarcaciones y sistemas marinos.
Además, los ingenieros navales manejan herramientas avanzadas de simulación y modelado, permitiendo diseños optimizados que cumplen con los estándares internacionales. Aunque no suelen operar las embarcaciones, su labor es crucial para que estas funcionen de manera óptima en diferentes entornos.
El ingreso promedio de un ingeniero naval en Perú depende de su experiencia y campo de especialización. Un recién egresado puede empezar con un sueldo base de S/3.000. Sin embargo, aquellos con mayor experiencia, especialmente en áreas como el mantenimiento de flotas pesqueras, pueden percibir entre S/8.000 y S/15.000 mensuales. Empresas líderes en el sector pesquero, como TASA y Copeinca, destacan como principales empleadores de estos profesionales.
Las oportunidades laborales para los ingenieros navales son diversas. Pueden desempeñarse en astilleros como los de SIMA Perú, con sedes en Callao, Chimbote e Iquitos, así como en empresas navieras, pesqueras y talleres especializados. En la selva peruana, donde el transporte fluvial es esencial, estos profesionales son indispensables para mantener operativas embarcaciones como barcazas y motochatas.
Su participación también se extiende a la gestión portuaria, sociedades de clasificación y proyectos de desarrollo marítimo. Este campo laboral, en constante expansión, asegura un panorama alentador para quienes eligen esta carrera.
El moderno terminal portuario de Chancay, situado al norte de Lima, impulsará una mayor necesidad de ingenieros navales en Perú. Este megaproyecto, concebido como un centro logístico clave para el Pacífico Sur, demandará expertos altamente preparados para garantizar el mantenimiento y funcionamiento eficiente de las embarcaciones.