España llegó el sábado a Orense con el susto en el cuerpo por todo lo vivido en Bratislava. El calamitoso partido después del descanso, las dos prórrogas, la polémica forma con la que se alcanzó la primera, con la que llegó la segunda, los dos triples salvadores de Santi Yusta... el caso y lo más positivo es que la nueva España de Scariolo afronta hoy la posibilidad de lograr la clasificación para el Eurobasket del próximo verano. Las derrotas ante Bélgica y Letonia convirtieron los dos duelos con Eslovaquia en una especie de eliminatoria directa para lograr la clasificación. Y el primer partido se resolvió a favor, aunque fuera de aquella manera.
«Fue un partido emocionante en el que hubo muchas cosas buenas y algunas cosas malas. En lo bueno pongo la competitividad del equipo, la primera parte que fue excelente, la capacidad de coger diez rebotes más que el rival a pesar de la inferioridad física de talla evidente, la inteligencia baloncestística con la que los jugadores supieron captar el ajuste hecho en un momento dado de la prórroga poniendo una defensa que no habíamos trabajado estos días», comentó Scariolo. El de Brescia prefirió quedarse con lo poco bueno que se presenció en el Tipos Arena.
Porque el partido dejó demasiadas lagunas en un equipo en el que se produjo el debut en partido oficial de Sergio De Larrea, Mario Saint-Supery e Izan Almansa. Y los tres novatos no fueron precisamente los más flojos ante los animosos eslovacos. En esa dirección apuntó el seleccionador: «Es fantástico porque hay muchos jugadores de nuestro equipo que no se habían visto en una situación así y aprecio que hayan tenido esta experiencia».
Pero el papelón del equipo durante demasiados minutos preocupa: «Hubo cosas que no nos gustaron: mucho fallo cerca de canasta, alguno en los tiros libres y bastante relajación al inicio del tercer cuarto. Son cosas sobre las que reflexionar y trabajar, eso sí mejor tras ganar que tras perder».
Para intentar cerrar la clasificación en el Palacio Paco Paz de Orense, el seleccionador no podrá contar con uno de los referentes del bloque, Xabi López-Arostegui. El alero del Valencia es el capitán del grupo con sus 50 internacionalidades, pero sufre una sobrecarga en la rodilla izquierda que le impedirá estar en pista. Eso supone que el equipo esté en manos de los Santi Yusta y Fran Guerra, los mejores en el partido del viernes, y que otros como Alocén, Salvó o Pradilla estén obligados a dar varios pasos al frente.
Y es que la victoria ante Bratislava dejó varias pistas del rival. Brodziansky, como se esperaba, fue su líder. Pero es que Fusek y sus 2,22 fueron una pesadilla con su media docena de tapones e Ihring y Krajcovic tuvieron demasiados minutos en los que se adueñaron del partido.