“¡Bájense a la verga! Tranquilos, no hagan nada, dejen de grabar”, fueron las palabras con las que un grupo de hombres armados interrumpió la entrevista en vivo que la chef Zahie Téllez, jueza del reality show MasterChef Celebrity, daba a una estación de radio.
Fue el inicio de un secuestro que duró seis horas y media en las que la chef y su esposo vivieron momentos de pánico y terror, luego de ser plagiados el sábado pasado a plena luz del día sobre la autopista México-Cuernavaca, en los límites de la Ciudad de México y Morelos. Seis horas y media más tarde fueron liberados. Ambas personas están en buen estado de salud y no presentaron ninguna lesión.
A 48 horas del plagio la policía sólo ha detenido a uno de los presuntos implicados, quien viajaba en la camioneta de la chef; el resto de la banda aún sigue libre.
Miguel Ángel Urrutia Lozano, secretario de Seguridad de Morelos, confirmó que la privación de la libertad ocurrió en una recta prolongada, ubicada en el kilómetro 46 de la autopista, justo antes de la estatua de José María Morelos.
La chef viajaba en compañía de su esposo Alberto Escobar. Ella conducía la camioneta en la que viajaban y ella misma decidió hacer una parada en la zona de Tres Marías, en los límites de la Ciudad de México y Morelos.
El plagio ocurrió mientras Téllez daba una entrevista en vivo, vía Google Meet, para un programa de radio de Grupo Imagen, donde hablaba sobre el premio Ángel del Turismo, que ganó en la categoría de mejor experiencia gastronómica.
La periodista Cecilia Núñez, con quien hacía la entrevista la chef, narró a El Financiero que llevaban tres minutos de diálogo para el programa Concierge en Imagen. Apenas había hecho dos preguntas cuando escuchó la voz de un hombre.
“Se escuchó una voz y ella creo que no advirtió de qué se trataba porque se veía tranquila y le dijo a la persona ‘estoy en vivo’, pero luego ya se escuchó otra voz que les dijo: ‘¡Bájense a la verga! Tranquilos, no hagan nada, dejen de grabar’”. Se vio movimiento y se cortó la comunicación.
Eran las 11:55 de la mañana del sábado. Núñez explicó que de inmediato trataron de comunicarse con la chef, pero ya no respondió, por lo que denunció al 911, 088 y a la Guardia Nacional.
Las llamadas fueron claves para la rápida actuación de las policías de Morelos, Ciudad de México y la federal.
Por la forma de operar se presume que el plagio fue fortuito; es decir, que la chef y su esposo estuvieron en el lugar equivocado a la hora equivocada, pues en esa zona se han reportado otros casos de personas desaparecidas y secuestradas.
El secretario Urrutia Lozano dijo que el trabajo coordinado entre autoridades permitió rescatar, en cuestión de horas, a la pareja secuestrada y detener a una de las personas presuntamente implicadas en los hechos.
Más tarde, en entrevista para El Financiero, Urrutia Lozano agregó que fue mediante el sobrevuelo de drones y con el apoyo de cámaras de videovigilancia como lograron ubicar un domicilio en el municipio de Huitzilac. En ese lugar se logró la liberación de la chef y su esposo.
El funcionario confirmó que una persona (cuya identidad se mantuvo en reserva) fue detenida en flagrancia porque conducía la camioneta de las víctimas. Su situación jurídica se definirá en las próximas horas.
Margarita González, gobernadora de Morelos, dijo que un elemento clave en el rescate fue que días antes del plagio se instalaron cámaras de seguridad en la zona donde fueron rescatados, pues se trata de una “zona conflictiva”. —Con información de Teodoro Rentería/Corresponsal
