El intento de tratar el proyecto de Ficha Limpia en la Cámara de Diputados fracasó por falta de quórum. Cumplidos los 30 minutos reglamentarios de espera, el presidente de la Cámara, Martín Menem, dio por levantada la sesión, lo que generó críticas de la oposición y suspicacias sobre el cumplimiento estricto del reglamento. La iniciativa busca impedir que personas condenadas por corrupción en dos instancias puedan presentarse como candidatos.
Rodrigo de Loredo, diputado nacional por la UCR, expresó sus reparos en el programa Si pasa, pasa de Radio Rivadavia. Aunque reconoció que el quórum no se alcanzó en el tiempo estipulado, calificó la decisión de levantar la sesión como "rara". Según el legislador, "pareció haber una imposición a no tener tanta paciencia", lo que despertó suspicacias sobre los motivos detrás de la rigurosidad aplicada.
Menem, por su parte, se defendió en redes sociales, y aseguró que actuó en estricto apego al reglamento. "Desde que asumimos, nos comprometimos a ser inflexibles en el cumplimiento de las normas", escribió en un extenso hilo de Twitter. También recordó un caso previo en el que tomó una decisión similar, incluso cuando afectó a su propio bloque, La Libertad Avanza. "Vinimos a la política para respetar las normas y cambiar las malas prácticas", afirmó.
El proyecto de Ficha Limpia cuenta con apoyo transversal en algunos sectores, pero también enfrenta resistencias. El debate en torno a esta iniciativa cobró un cariz político determinante, ya que muchos analistas consideran que la ley está diseñada para inhabilitar a figuras como Cristina Fernández de Kirchner. La semana pasada, la Cámara de Casación Penal confirmó la condena por administración fraudulenta contra la exmandataria en la causa Vialidad, ratificando la sentencia dictada en primera instancia.
De Loredo defendió la iniciativa como una herramienta para combatir la corrupción y mejorar la calidad institucional. "Es un disparate que alguien condenado por corrupción pueda ser candidato", afirmó. Para el diputado, la normativa actual, que permite postularse incluso con condenas en dos instancias, es una falla que debe corregirse. "Si para manejar un taxi necesitas un prontuario limpio, ¿cómo puede ser que alguien con condenas acceda a administrar los recursos de todos los argentinos?", cuestionó.
El proyecto de ley establece que quienes tengan condenas confirmadas en dos instancias por delitos de corrupción queden inhabilitados para postularse a cargos públicos. Según De Loredo, esta es una práctica que ya se aplica en democracias avanzadas y forma parte de una agenda de reforma política que lleva años pendientes en Argentina. "No es algo nuevo ni algo que estemos planteando ahora para afectar a un candidato en particular. Es una respuesta institucional para evitar la corrupción en el Estado", aseguró.
La falta de quórum en la sesión especial también dejó en evidencia la división entre bloques. Según explicó Silvia Lospennato, autora del primer proyecto de Ficha Limpia en 2016, dos legisladores ausentes por problemas de salud impidieron alcanzar los 129 diputados necesarios. Sin embargo, aseguró que buscarán una nueva oportunidad la próxima semana, durante los últimos días de sesiones ordinarias del Congreso. "Es increíble que hayamos naturalizado convivir con personas condenadas por corrupción. La Ficha Limpia es una respuesta a este reclamo, y lo vamos a intentar una y otra vez", enfatizó.
Desde Democracia para Siempre, otro de los bloques presentes en la sesión, Fernando Carbajal pidió que el Gobierno convoque a sesiones extraordinarias para tratar los temas pendientes, incluyendo el proyecto de Ficha Limpia. "Queremos reunirnos en noviembre y diciembre para tratar este y otros proyectos clave", afirmó.
Por su parte, De Loredo expresó su esperanza de que el proyecto avance. "Si asisten todos los legisladores del PRO, Libertad Avanza y los bloques aliados, deberíamos aprobarlo. Es un tema importante y la ciudadanía lo reclama", aseguró en la entrevista.