El reciente anuncio de Alexander Mikheev, jefe de Rosoboronexport, sobre la firma de un contrato para exportar el caza ruso furtivo de quinta generación Su-57 Felon ha generado una oleada de especulaciones sobre el posible comprador. Aunque el cliente no ha sido identificado oficialmente, muchos observadores apuntan a Argelia como el principal candidato.
Argelia, conocida por su estrecha relación con la industria de defensa rusa desde la Guerra Fría, ha sido destacada como el posible primer operador extranjero del Su-57. Este caza de quinta generación podría seguir los pasos del MiG-25, un avión que también marcó un hito en su flota hace décadas. Según la cuenta de análisis Kad-Ghani, "Argelia hace historia nuevamente", vinculando esta adquisición con la tradición militar del país.
Sin embargo, no existen pruebas concluyentes. Aunque los rumores circulan desde 2020, cuando el entonces jefe de Estado Mayor argelino Said Chengriha visitó Rusia y discutió la posibilidad de adquirir el Su-57, no se ha confirmado oficialmente ningún pedido. En aquella ocasión, se habló de un acuerdo para 14 aviones valorados en 2.000 millones de dólares, pero todo quedó en el terreno de la especulación.
No hay que perder de vista que Argelia sigue embarcada en un aumento del gasto militar. De hecho, según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), “el gasto militar de Argelia aumentó un 76%, alcanzando los 18.300 millones de dólares. Se trata del mayor nivel de gasto jamás registrado por Argelia y el mayor aumento anual de su gasto desde 197 . Este aumento se vio facilitado por un fuerte aumento de los ingresos procedentes de las exportaciones de gas a los países europeos, que rechazaron los suministros rusos", explica el informe.
Para Mohamed Chiker, profesor universitario y especialista en asuntos militares, el régimen argelino pretende con esta fuerte inversión compensar su gran retraso tecnológico en el campo del armamento. “Hasta ahora, el ejército argelino siempre se ha decantado por la artillería pesada rusa, que ha demostrado su ineficacia en el conflicto con Ucrania. El régimen ve que Marruecos está invirtiendo en equipos modernos, como F-16 o drones turcos o israelíes, en alianzas sólidas, basadas en transferencias de tecnología, y en equipos de última generación en materia de vigilancia e inteligencia militar”.
Aunque algunos analistas sugirieron que China podría ser el comprador, esta hipótesis parece poco probable. El Chengdu J-20, desarrollado localmente, cubre las necesidades operativas chinas. Además, el país está volcado en proyectos como el prototipo de sexta generación "White Emperor". En el caso de India, su estrategia de diversificación hacia armamento occidental hace menos probable que opte por el Su-57, mientras que las restricciones económicas y tecnológicas de Irán dificultan que pueda ser el cliente.
Por el contrario, Argelia parece encajar mejor como comprador. Su estabilidad económica, gracias a las exportaciones de gas y petróleo, le permite financiar este tipo de adquisiciones, y su infraestructura ya está adaptada a los cazas rusos, como los Su-30 y MiG-29, lo que facilitaría la integración del Su-57.
Argelia opera en un contexto geopolítico complejo, con tensiones crecientes en el norte de África. La compra de un caza avanzado como el Su-57 fortalecería su posición militar frente a Marruecos, un rival estratégico que ha reforzado sus lazos con Estados Unidos e Israel. El Su-57, con su tecnología furtiva y capacidades multirrol, sería un activo crucial para garantizar su ventaja regional.
Además, desde una perspectiva técnica, el Su-57 encaja perfectamente en la estrategia de defensa de Argelia. Su diseño reduce la firma de radar, y sus avanzados sistemas de aviónica, como el radar AESA "Belka" y el conjunto de sensores 101KS, lo convierten en una plataforma ideal para operaciones complejas.
¿Debería preocuparse España por su vecindad con Argelia? El régimen argelino y nuestro país mantienen buenas relaciones aunque en los últimos años los acercamientos a Marruecos han llevado a no pocos roces diplomáticos que en muchas ocasiones se han trasladado al ámbito de las relaciones económicas. En cualquier caso, parece poco probable que en el sistema geopolítico actual pueda suponer un peligro para España. Sin embargo, si la situación con Rusia se sigue deteriorando, estaríamos hablando de un territorio amigo de Moscú con poderoso armamento procedente de este país que incluye submarinos y misiles de tecnología rusa a muy pocos kilómetros de nuestra frontera y solo separados por el Mediterráneo, poca cosa para los sumergibles argelinos de tecnología y armamento ruso.
El Su-57 es el orgullo de la aviación militar rusa. Con una longitud de 19,8 metros, una envergadura de 14 metros y un peso máximo de despegue de 35 toneladas, combina maniobrabilidad, sigilo y potencia de fuego. Está propulsado por motores AL-41F1 con empuje vectorial, capaces de alcanzar velocidades de hasta Mach 2 y un alcance operativo de 3.500 kilómetros.
El avión está diseñado para operaciones furtivas, con la mayor parte de su armamento almacenado en compartimentos internos. Entre su arsenal, destacan los misiles aire-aire R-77M y R-74M, así como los misiles aire-tierra Kh-59MK2 y Kh-31. Este caza también cuenta con capacidades multirrol, que van desde misiones de combate aéreo hasta ataques de precisión en tierra.
Actualmente, solo Estados Unidos, Rusia y China producen cazas de quinta generación, como el Su-57, el F-35 y el J-20. Esto reduce significativamente el mercado potencial para el Felon. Sin embargo, para países como Argelia, con una larga tradición de cooperación con Rusia y un deseo de mantener su superioridad militar en la región, el Su-57 es una opción atractiva.
La Fuerza Aérea de Argelia opera 551 aviones, incluidos 102 cazas e interceptoras, 22 cazas de ataque, 60 aviones de transporte militar, 87 aviones de entrenamiento, 9 aviones de misión especial y 3 aviones para repostar en el aire, según los datos Global Firepower correspondientes a 2020. El medio Rossíiskaia Gazeta asegura que la aviación de combate argelina es la más poderosa del continente africano y se asienta en la tecnología rusa. Cabe recordar que desde su independencia en 1962, Argel estrechó vínculos con la Unión Soviética, mientras que Marruecos ha estado bajo la órbita de EEUU.
La base de la Fuerza Aérea son 45 cazas pesados Su-30MKA de cuarta generación, pero también cuenta con la mayor flota de bombarderos de África con 36 cazas Su-24M. Argel ha visto con preocupación el auge de la potencia aérea marroquí y en este contexto ha firmado recientemente un contrato para adquirir 14 cazas Su-57 del fabricante ruso Sukho. También ha firmado contratos para comprar 14 bombarderos Su-34 y 14 dispositivos de dominación aérea Su-35.
La Fuerza Aérea de Argelia también posee 268 helicópteros, incluidos 45 helicópteros de ataque. Sus fuerzas terrestres están compuestas por 2.024 tanques de guerra, 7.000 blindados, 324 cañones autopropulsados, 396 cañones de campo y 300 lanzamisiles.
La armada argelina dispone de 201 unidades navales, con 8 fragatas, 10 corbetas, 8 submarinos, 65 patrulleros y dos dragaminas marinos, una flota muy superior a la marroquí. Su flota comercial asciende a 114 barcos, 12 puertos importantes y 149 aeropuertos en servicio. La gran fortaleza de la marina son los ochos submarinos: de ellos cuatro son de la clase 636 y dos tipo 877EKM, de la clase Kilo más antigua. En 2019, el Ministerio de Defensa Nacional de Argelia informó del lanzamiento de misiles de ataque a tierra desde submarinos. Esta capacidad de disuasión no la posee ningún país del Mediterráneo a excepción de Israel.
Las fuerzas terrestres incluyen 2.024 tanques de guerra, 7.000 blindados, 324 cañones autopropulsados, 396 cañones de campo y 300 lanzamisiles. Según se ve en una fotografía publicada por una fotografía por “The Political Room”, Argelia habría posicionado un lanzacohetes múltiple Smerch a la frontera con Marruecos.
En cualquier caso, la “alianza” de Argelia con Rusia le deja joyas como los seis submarinos de su Armada: cuatro 636 de fabricación rusa, más otros dos que deberían llegar en breve si se cumplen los plazos previstos, aunque la guerra en Ucrania podría retrasarlo. Los dos de la clase Kilo, en concreto el modelo 877EKM, están entre los más silenciosos del mundo de propulsión diésel-eléctrica. A estos habría que sumar los dos modernizados de la clase 877, también de diseño soviético.
Los de la clase Kilo, con muy escasa señal, son capaces de permanecer bajo superficie 45 días; transportan una dotación de 52 personas e incorporan 6 tubos lanzatorpedos de 553 mm; 18 torpedos o 24 minas; ocho misiles Strela 3M y cuatro Kalibr 3M54K. e incorporan cuatro misiles Kalibr. Este arma es sin duda la mayor amenaza a la seguridad de España y a la del resto de Europa occidental.
Esto supone un salto cualitativo al situarse con capacidad de lanzar misiles de ataque a tierra desde un submarino, algo que pocos países pueden hacer, incluida España. En el mundo sólo EE.UU., Rusia, China, Corea del Norte y Reino Unido tienen esa capacidad para lanzar el misil desde un submarino y destruir objetivos terrestres.
Misiles Kalibr con 2.400 km. de alcance. El Kalibr es un misil de crucero subsónico de seis metros de largo diseñado para volar bajo a través del espacio aéreo enemigo. La versión de ataque terrestre tiene un alcance de hasta 2.400 kilómetros a mach 3 y una ojiva explosiva que pesa media tonelada. También puede transportar una cabeza nuclear a 1.500 kilómetros de distancia. Según los expertos equivaldría al misil Tomahawk estadounidense. Las fuerzas rusas han utilizado misiles Kalibr contra objetivos contrarios al régimen en Siria y en los últimos meses también en Ucrania. Esto supone que tenemos un potencial enemigo en el flanco sur que podría poner un misil de crucero desde uno de sus submarinos en cualquier punto de España sin la más mínima capacidad de respuesta.
A ello se une una potente flota de helicópteros de combate, aviones de transporte y de patrulla marítima, helicópteros navales EH-101, seis corbetas de reciente adquisición en China y Rusia y dos fragatas Meko A-200, y una flota de carros de combate que supera el millar.
Posible base naval de Rusia en Argelia. A todo esto, hay otro factor más añadido y es el deseo de Rusia de instalar una base naval en Argelia, a apenas 200 kilómetros de España, lo que cobraría sentido tras las amenazas de Putin por la posible ampliación de la OTAN a Ucrania, Finlandia y Suecia.