Durante la noche, la guerra en Ucrania se ha intensificado con enfrentamientos de uso masivo de drones por ambas partes. Serhiy Popko, jefe de la administración militar de Kiev, informó que Rusia lanzó un total de 73 drones hacia la capital ucraniana. Las defensas aéreas lograron derribar 50 de ellos, mientras que 19 permanecen sin localizar y otros cuatro continúan en vuelo.
La alerta aérea se prolongó por más de tres horas, con los drones acercándose desde múltiples direcciones. Entretanto, Rusia acusó a Ucrania de realizar ataques similares, afirmando que sus sistemas antiaéreos destruyeron 34 drones ucranianos, de los cuales 27 tenían como objetivo la región de Kursk, situada en la frontera.
En este contexto, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, manifestó su confianza en que la guerra podría finalizar en 2025, coincidiendo con la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos. Según Zelenski, el conflicto podría resolverse cuando Rusia tome la decisión de cesar las hostilidades y Estados Unidos adopte una postura más firme en su apoyo a Ucrania.
