No hay mejor manera de irse a un parón que con tres puntos en la mochila. El
Athletic venció al
Madrid CFF en un partido cerrado a más no poder. Apenas hubo concesiones y solo el ímpetu de un alma libre como
Vilariño logró desatascar la contienda faltando un cuarto de hora. La navarra se pegó un sprint imposible para rescatar un balón que se perdía por línea de fondo para convertirse en saque de puerta para las visitantes. Se lanzó al suelo, en un
ejercicio de malabarismo lo salvó, lo estrelló contra una rival y forzó un córner. De ahí llegó el gol. El despeje de puños de
Paola se quedó corto y
Vilariño lo puso en dirección a la red con un voleón. Primera diana como leona en su tercera aparición con el primer equipo.
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