El París Saint-Germain, reservando a varios titulares y sin gran intensidad, cumplió (3-0) este viernes ante el Toulouse en la 12ª jornada de la Ligue 1, donde pudo mantener su ventaja como líder.
Este duelo estaba inevitablemente marcado por la cercanía del crucial partido del martes en el campo del Bayern de Múnich, en la quinta jornada de las ocho de la primera fase de la Liga de Campeones, donde el campeón francés está en la mitad baja (25º de 36) de la clasificación.
Una situación antagónica a la de la Ligue 1, donde los hombres de Luis Enrique mantienen su ventaja de seis puntos sobre el segundo, el Mónaco, que en el primer turno de este viernes había derrotado 3-2 al Brest.
"En la Ligue 1, somos realistas. En la Liga de Campeones, estamos lejos de nuestro nivel. Nuestra efectividad va a aumentar, muy pronto", vaticinó Luis Enrique, que celebró poder llegar al duelo contra el Bayern "llenos de confianza".
El PSG había decidido privarse para el duelo liguero del viernes de varios jugadores, suplentes o no convocados (Marquinhos, Willian Pacho, Nuno Mendes, Gianluigi Donnarumma, Vitinha).
Los jugadores de este 'equipo B' no decepcionaron y, a pesar de un juego poco vistoso, consiguieron que los tres puntos de quedaran en el Parque de los Príncipes.
El portugués Joao Neves abrió el marcador con una volea en el 35, a centro del capitán de la noche, Achraf Hakimi.
El Toulouse apenas inquietaba al arquero Matvey Safonov y el PSG no sufría, aunque llegó a la recta final con ese corto 1-0, que no invitaba a ninguna relación.
Fue entonces cuando el brasileño Lucas Beraldo (minuto 84) y el portugués Vitinha (90+1), que había empezado en el banquillo, sentenciaron definitivamente.
"No brillamos en este partido, pero encontrad un equipo que brille durante los sesenta partidos que dispute en la temporada", retó Luis Enrique a los periodistas después de la victoria.
El Toulouse, décimo de la tabla, cortó así una racha de tres victorias seguidas en liga.
En el partido de este viernes, la tribuna Auteuil del estadio del PSG estaba parcialmente cerrada como cumplimiento de una sanción por los cánticos homófobos escuchados en ella el pasado 19 de octubre durante el partido ganado 4-2 al Estrasburgo.
Ese cierre parcial, la falta de brillo del rival y la complicada situación del equipo en Europa se tradujeron en falta de ambiente y entusiasmo de la hinchada local, en una noche gélida en París.
Con la misión cumplida, el PSG y sus seguidores se concentran ya en el duelo del martes en Alemania, donde no lo tendrán fácil: el Bayern de Múnich, también líder sólido en la Bundesliga, jugó igualmente este viernes y venció también en casa 3-0, en su caso frente al Augsburgo.
Unas horas antes, el Mónaco (2º) había cumplido imponiéndose 3-2 en casa al Brest (12º), en un duelo entre dos 'equipos Champions', que en el máximo torneo europeo están siendo hasta ahora la revelación de esta edición.
Para el Brest, la Ligue 1 está siendo mucho más problemática y encadena un tercer revés seguido. Sufrió además la lesión de su mediocampista Pierre Lees-Melou, antes de visitar al Barcelona en Champions.
El club del Principado tuvo en el joven Maghnès Akliouche al héroe de la velada, con sus goles en los minutos 5 y 90+1. El otro gol del Mónaco lo firmó en el 24 Aleksandr Golovin.
Por parte del Brest, Abdallah Sima había acortado diferencias provisionalmente en el 50 y en el 90+6 Ludovic Ajorque maquilló su derrota.
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